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EN EL RÍO DE LA PLATA
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Chuquisaca, que tiene presente aquellas materias,
por ser de su jurisdicción, daría cuenta
á
V.
M.
de
lo que resultase de la diligencia, y habiéndola he–
cho, me ha escrito la carta cuya copia remito
á
V.
M.
con ésta, en que refiere las utilidades que se segui–
rán de fundarse la dicha Inquisición, con otras ad–
vertencias tocantes á este punto; y esta convenien–
cia tan reconocida del servicio de Dios, nuestro
señor, y de V.
M.,
se dará la mano ·con las diligen–
cias y prevenciones que me manda hacer V.
M.
en
cédulas aparte, en razón de los excesos que
~con
sus
entradas hacen los portugueses de San Pablo en la
prov'incia·del Paraguay, rlerramándose después por
la de Buenos Aires, Chuquisaca, Tucurnán, Chi–
chas y Lipes; y así suplico á V.
M.
tenga por bien
de toi11ar sobre este particular la resolución que pide
Iiegocio tan grave .-Guarde Dios la católica y real
persona de V.
M.
como la cristiandad ha menes–
ter.- Callao, ocho de Junio mili seisciei1tos cuaren–
ta yuno.-El
Marqués de
Mancera)) .-(Rúbrica).
Abandonada esta id·ea por aquel entonces, hubo de
revivir luego en los años inmediatos y especial–
e en los de
1662 y
siguientes. Tomóse pretexto para
ella de la fundación de la Real Audiencia en Buenos
Aires, y con ese motivo el Tribunal de Lima dirigió
al Inquisidor General un ofi-cio recordándole los su–
cesos que antes habían hecho surgir ese pensamien–
tu, sugiriendo la idea de que se fundase, ya en
Buenos-Aires ya en Córdoba del Tucumán, ciudad
mediterránea colocada en el promedio entre aquel
puerto y la ciudad de Lima.. ceLa comunicación con'
España por aquel puerto, decía en su apoyo, por la
mar no es dilatada ni dificultosa: bien se gober–
naría con dos inquisidores, fiscal y demás ministros,