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LA INQUISICIÓN
ciones
y
advertencias en orden al cuidado con qne
debo estar
y
atender
á
las visitas y e.ntra.da.s de los
navíos que vienen
á
este puerto, por sertan remoto,
y
que por talle buscará la malicia enemiga de la re–
ligión católica para infestar estos reino·s por él, como ·
varias veces ha intentado;
y
como el Santo Oficio no
tiene aquí medios para que se hagan estas diligen–
cias tan exactamente como se deben hacer, en que
son necesarias.lanchas y g:ente, y que pidiéndolas al
gobernador puede ser que lo dificulte ó no las dé
con la promptitud que sean menester, haciéndolo
·gracia, ó que quiera que le den individual noticia de
la diligencia, que de la soberanía con que por acá so
portan todo se puede presumir, mayormente habién–
dose fundado en esta ciudad Real Audiencia, conque
tode tiene nueva forma; me ha parecido propo-
. ner á V. A. estos inconvenientes de su mayor servi–
cio, y que .sí se remediarán conque V. A. se sirva
despachar cédula, ordenando al presidente y gober–
nador que fuere -de esta ciudad me dé todo el con–
curso y asistencia necesaria. para el
cumplimi~nio
de las órdenes acordadas que tengo) siempre que lo
pida, con lo demás que
a
V. A. le pareciere éonve–
niente en orden á que se conser•ve la jurisdicción
con toda indemnidad y mayor servicio de Dios.
«También se me ofrece proponer á V. A. que ol
año pasado de 1639 ó 40 se sirvió V. A. de despachar
cédu.laen favor del comisario y los .familiares de la
ciudad de
Sántia.gode Chile para que aquella Real
Alfcfiencia desembarazase la iglesia del señor Santo
Domingo los días del glorioso San Pedro Mártir,
Jueves Santo y el día que en esta iglesia se cele–
.brase la fiesta del Corpus Christi para que la ocn-
pase el comisario con los familiares, como hasta aho-