. EN· CA.RTAGENA. DE INDIAS
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Suspendiél'onse los proceso·s de Fr. Juan de ]a
P eña:,
ac.usa:do de
~ol i ci tante,
y
el ele
D.
Juan de Hita
y
Ledesn~ a,
denunciado en Cuba de varias proposicio–
nes, sel.fl.ten.cias que fueron desaproba;.das más tarde
(i}liil. -
el
Consejo;
y
el
de otro francés de los del Bra–
s.11,
Juan
P e-ti~,
acusado igualmente de proposi- ,
CNvnes.
Por fin, el último clomingo
1
de Julio de
1618
pu_,.
dieron celebrar un autillo, de que quedó la ciudad
grande,rÍ1en te edificada, según escribían al Corrse–
fo.
r
No hubo en él, sin embargo, sinó cuatro reos,
d<D_s bígarpos;
2
Fr. Bernardo de Morales;.,.franci sc-a–
no.~
natural de México, que . vivía en la Habana,
donde fué testificado de haberse casado, y que abjuró ·
"'de
le.viy sahó desterrado
á
las galeras de Espafla pa–
ra sérvir al ren1o y sin sueldo; y Ji'rancisco Gómez
ele
León, él portu.gués de cuya conversión tan pocas
®speranzas abrigaban sus jueces . Denuncia-do en la
H:llbama de que se le h abía visto azotar
á
un cruci-
. fijo, fué preso en Agosto d.e
+613
y condenado
á
toF–
meuto
y
puesto ya
en.elpotro, confesó que era ju–
dio
y
que había de morir en
la
le'y de Moisés . En
las diversas audienci as que con él tuvieron los con–
suJtores, en las 'que le refutaron sus opiniones, se
mantuvo siempre firme en no creer en los artículos de
la fe .católica, y
a~í,
como pertinaz, fu é sentenciado
á
ser relajado al brazo secular; pero después, por es–
CFúpulos de Salcedo, se envió el proceso en
consul~
_ta alt Consejo,
y
en último término fué admitido
á
reconciliación' con confiscación de bienes, hábito y
r. Carta d € 7 de Agosto de
1618.
2.
Sebastián Hernánd€7., mulato,
y
Alonso de Masegán.