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cargo de responsabilidad

á

dichos padres, deben

eJll–

pezar quitándoles el carácter religioso y monacal de

su profesion, para darles lugar en el catálogo de los

gobiernos absolutos aunque patriarcales.

Exacto era el juicio del impal'cial, justificado é irre–

cusable generalAngles,

á

cuyos ojos, "los padres de la

compañia querian concordar las cosas mas opuestas,

ser religiosos, y al nlismo tiempo altivos y dominan–

tes; misioneros y c01nerciantes; pobres, y manejando

desmedidos caudales; jesuitas, y

militar~s

con armas

y derran1ando sangre; sobrarles todo con esceso, y

apoderarse de lo poco de los vecinos; vasallos, y no

reconocer al Rey ni suj etarse

á

sus leyes sino en lo

favorabl~;

ser súbditos, y vivir co1no soberanos; com–

pasivos y crueles; escribir historias, y apartarse de la

verdad en su contesto, y servirse de n1edios ilícitos

para conseguir su intento."

307. No dejemos de notar, que los encomios que

de las misiones del Paragua.y,

ú

otras semejantes, hi–

cieron )os viaj eros,

ó

escritores que se han fundado

en su r elacion, pueden equipararse

á

los que hacen

no pocos extrangeros tmnporahnente residentes en

un pais. Interesadqs en el ra1no de industria

á

que se

han contraído, y en los goces materiales de la vida,

no escudriñan, no piensan en el rég imen y economía

interior de las instituciones. En teniendo seguridad

en sus personas y haciendas, y en viendo ferro-carri–

les, buen enlosado, y gas que alumbra la ciudad, de

palabra y por escrito clan testimonio de la bienandan–

za del pueblo en que11noran. Los que componen ese

pueblo, y los estrangeros cos1nopolistas, que se repu–

tan ciudadanos de todos los paises, por ,el hecho de ser

hon1bres, no se contentm1 con las esterioridades, ·sino

que adelantan el discurso, y exa1ninan el n1érito de

las instituciones, y la conducta de los encargados de

su cumplinliento. Bueno es, dicen todos ellos, que

haya comodidades n1ateriales, mejor aunque haya se–

o·uridad en las personas y bienes; pero no solo la vi–

aa.

y

la riqu

eza bast

an para creer conseguida la feli–

cidad:

hfW

t

ambi.en

honor, hay libertad,

h~y

igual-