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lllRS útil á ,la República, que un noble consen;e sn estado,
que el que 1nuem. un pobre particular. Aclemas, si no
puedes emplear tus bienes socorriendo, sin hacer mi..
serable tu vida, no estas obligado á tanta costa á con–
s-ervar á otro la suya; pues seria obligarte :í safrir el
mal que tratabas de evitar al prógimo." Poco antes
babia dicho él mismo y sentado de una manera abso–
luta y general, que "habia oblign.cion de dar limosna
al prógimo en estrema necesidad, de los bien es nece–
,sarios, esto es, convenientes al estado, y O.e los super–
fluos á la naturaleza, porque ele otra suerte, no habría
precepto de dar limosna, si en tal ti.ernpo no obligá–
ra. " Al principio había def ecesidad cstr.ema
asi-"es aquella en que el so halla en peli–
gro probable y moralment e perder la vicia,
si no es socorrido." [278] Si el señor Pascal no tenia
derecho á comentar al P . Vasquez, lo tenia ciertanlen–
te el P. Castro-Palao y domas de la compañia, reser–
vándose desde luego el de sacar á plnza, las doctrinas
no laudables de los comentadores, que protejienclo á
los ricos, no les repotian-"haz á otro lo que quisie–
ras que él hiciese contigo." ¿No recuenlan en este mo–
mento los lectores lo que algnnn, vez tnYimos cuida–
do ele notar, que nuestros padres :fijan la cnestion de
un modo en ciertas ocasiones, y al c1iscu-:.Tir en la re–
solucion la cambian, como mol'tificados por uu remor–
dimiento? Por ejemplo ahora, el P . Castro-Palao tra–
taba fran camente ele la necesidad de dar limosna de
lo necesario al estado, y de lo superfluo á la uaturale–
za ó á la vida, y acaba hablando de la vida miserable
del que se empeñas·e en conservn.r á otro su vida.
373. :Mucho se había molestado el P . Daniel con lo
que Pascal decia tan exacta como graciosamente res–
pecto del método de dirijir la intencion, y escribía
así-"procuremos penetrar este secreto, y hacerlo -
conocer mejor, como no lo ha hecho Pascal. Toda la
doctrina de la direccion ele la intencioB consiste en
enseñar, que en las cosas indiferentes por sí mismas,
segun es buena ó mala ]a intencion, es buena ó mala
la accion. Bonum opus inten tio jacit, ha dicho S. Agus~