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su enseñanza
y
prooicacion. Aunque entonces nó era tan frecuente
la confesion de solos los pecados veniales; porque el cristiano por
medio de la caridad puede borrar su multitud, en que tropíeza
muchas veces aun el justo; pero como la humildad
y
la delicadeza
de conciencia de los Santos les hacen aparecer abultadas las mis–
mas faltas leves, no se atrevian acercarse
á
la sagrada comunion sin
· puríficarse antes por la Confesion. En efectos vimos, que San Juan
Crisostomo cumplia, no menos que los fieles, con el precepto anual
de la Confesion indispensable para acercarse purificado
á
la mesa
eucarística : y quien juzgaba absolutamente necesaria la recepcion
de esto sacramento
á
fin de no acercarse temerariamente al augusto
misterio del altar, nunca se dispensaría de poner esta condicion
preceptuada, cuando al
acercar~e
con frecuencia
á
él hallase en su
conciencia mancha que puríficar. Esto es lo que quiere decir el es–
critor de su Vida al hacer
notar~
que se preparó para su muerte
con
los santos sacramentos
(1). San Agustín siempre se confesaba,
porque como él decia,
«
siempre hay en nosotros materia de confe–
»
sion, puesto que dificilmente podemos vivir en ese mundo siri
»
incurrir en faltas reprensibles; y cuando uno se sien te mal, no
»
puede omitir un remedio absolutamente indispensable para al–
»
canzar la salvacion; y no permitía que alguno aguardase la
»
muerte sin ser absuelto de sus pecados,
á
no querer exponerse
á
»
la eterna condenacion (2).
»
Nada diremos de San Fulgencio, San
(!)
Paliad.
inVita ejus.
Op. S. Jo. Chrysost. t.
I.-
(2)
Sernpm· confitm·e, sempe1·
habes quod confitearis. Difficile est in hac vita, ut sic mtttetur hamo, ut nih,il inve–
niatu?' in eo, quod rep1·ehendatttr.
S. Aug.
Enar. in Ps.
99, n. !6,
t.
IV,
col.
i28L
Pat1·ol.,
t.
XXXVII. -
Quando nobis male est, confiteamu'r peccata nostm: sine
Confessione non simus.
S.
Aug.Enar. in Ps.lbid.,
col.
22o.-
Confessio peccalorum
ad salutem necessaria.
Tom.
V,
col.
139
et
186.-
Adjustos pert,inet Confessio pecca–
to?'U?n.
Tom. V, col.
1382.-
Quantun~
exitium sequitur
eo~
qtti de isto sceculo vel non
regenerati exeunt, vel ligati.
Epist. 128.
-El
mimso Papa San Celestino desvanecía
la impostura calumniosa del Dr. De Sanctis, de que San'Agustin fué excomulgado
por este pontífice
ó
por su predecesor Bonifacio I, pues el mismo San Celestino de–
ci:t:
«
Augustinum sanctre recordationis virurn, pro vitre meriLis
IN NOSTRA Cül\:1-
»
l\IUNIONE SEMPEB
HABUillms.
»
S. Ccelestinus Papa,
Epist.
2
ad Episcopos Gallice.
Patrol,p
t,
LXV
1
col,
43, De
donde consta pues
Sr, De
San~tis,
que
San
Asustln
cou