1.
adjecerunt.
Los Santos Padres que nos han conservado incorruptos
los doéumentos historícos desde el tiempo de los Apostoles, dan un
testimonio irrefragable de la institucion divina
y
la promulgacion
apostolica de la confesion ¿Será capaz de desmentirlo la heregia
novelera?
Prosigue el Doctor de
innegable literatura:
«Por la manera de
))
expresarse de Sócrates, parece que .claramente puede
decirse'~
»
que la confesion haya sido instituida por el solo pecado de apos–
»
tasia :
y
esta es la
tercera consecuencia.
»
¡Lógica admirable que
deduce consecuencias sin premisas! Pero, ahi está el
Ev~ngelio
que
faculta á los Sacerdotes para
desatarlo todo en la tierra
y
remitir
los pecados,
sin
excepcion~
á todos
los que se les acusaren en confe..
sion. Ahí es.tán las Ep1stolas de los Apostoles San Juar\
y
Santiago,
que
con~idan
a
todos
los pecadores á que
co.nfiesen sus pecados.
Ahí
están los Scmtos Padres
y
Doctor~s
anteriores
á
Sócrates, que pre-.
dican la obligacion que incumbe
á
todos
de confesar los pecados,
hásta
los ocultos
y
de solo pensamiento.
Sócrates mismo enseña, que
todos
y
cada uno
de los miembros de la Iglesia debian confesar sus
pecados :
singulis Ecclesice, ut delicta sua qvarguant.
Si el.teologo
añticonfesionista hubiese leido
á
Socrates, lo
Gitara
con ingenuidad,
.no hubiera grabado en su
Ensayo
esa'
quinta impostura.
Sin
emq
bargo con tinuá con franqueza :
<<
Cuartct consecuencia.
Sócrates nos dice. que ,en su tiempo (en
»
el quinto siglo,) la confesion se conservaba solo entre los here–
>J
ticos, Con que, en el quinto siglo la eonfesion era un signo de
) heregia.
>)
Esto es ya algo mas que
una impostura:
es
á
la vez un
crímen de lesa lógica
y
de lesa Majestad. Entónces con tal dialec–
tica el
P.
maestro De Sanctis podra argumentar en esta forma :
«
En tiempo de Sócrat¿s la creencia en Dios sé conservaba entre
los hereges. Con que, en el quinto siglo la creencia en Dios era un
signo de heregia.
»
Bravo! Pero Sócrates mejor leido dice así:
(<
Los fieles que habian caído despues del, bautismo, se confesaban