Table of Contents Table of Contents
Previous Page  90 / 438 Next Page
Information
Show Menu
Previous Page 90 / 438 Next Page
Page Background

-82-

¡·es de los apóstoles, y apóstoles tambien eran llamados,

y

Vicarios de Jesucristo y Papas, y Sumos Pontífices, y Pon–

tífices máximos.

!2.

Funciones pn>pias de los Obispos.

~Ias

no em la palabra la que recomendaba y engrandecía

á

los obispos: eran sus sagradas y sublimes funciones, las

que los presentaban ante los fiele s, como lo merecían. "A

ellos les tocaba, son palabras del docto Tomasin, la predica–

cion de la palabra, la propagacion de las Iglesias, la conver–

sion de los jentiles, la administracion de los negocios ecle–

siásticos. Jesucristo ha instituido el sacerdocio; pero el

Obispo lo comunica

y

derrama para que lo ejerzan los pres–

bíteros; y es tanta la opulencia y fecundidad

cl~l

episcopa–

do, que no solamente dá á unos el sacerdocio, sino que tam–

bien comunica á otros la virtud y la fecundidad para nmlti–

plicarlo." Esto era lo que clíariamente pedían las Iglesias,

porque estas eran sus necesidades mas frecuentes y comu–

nes, fuera de los casos pertenecientes al supremo atalaya,

para la C<mservacion del órclen en

la

sociedad cri stiana.

3.

Considérase la economía del Episcopado.

San Pedro llamó

a

Jesucristo

Obispo de las atmas;

y

San

Pablo-Pontifice de los bienes jutwros,

por medio de

un. tabernáculo mas excelente

y

mas perfecto." Este tabe–

náculo es la Ig lesia; "tabernáculo er)jido por el Sei\or, y no

por hombre alguno," como decía el n1ismo Apóstol. Pero si

1a Iglesia es un edificio, todos los apóstoles son su funda–

mento:

si

es el rebaño encerrado en un aprisco, todos los

apóstoles son sus pastores: si es un campo, una viña, todos

ellos son operarios: si es una reúnion ele hombres espuestos

á

cometer pecados, todos los apóstoles reciben la potestad

de perdonarlos ó retenerlos; y si ántes tienen necesidad de

ser instruidos en el evanjelio, todos los apóstoles son envia–

dos á predicarlo, y á enseñar

y

bauti!Zar á todas las jentes.

De esta manera , la iguald ad, la unidad

d~

conciet·to y de

interés y ele oficio en la cultura del campo del Señor, donde

todos trabajan simultáneamente, sirve para acreditar y re–

comendar la unidad de la Iglesia crist.iana,

y

la verdad ccp