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de
18G5,<í
mas Jc ,·ce nulo hn.bia caclnc:ulo. Xo satisfecho
con esto, vió en el mismo din.
á
U:-l. l.
y
le cxpu;:;o lo
acontecido,
y
entonces por primera
YCZ
mostró U::l.
l.
la
Carta prorogatoria, que no leyó el :Ministro,
y
que solo
en parte tradujo el I!lmo.
Obi~po
de 'l'iberiópolis. S. E.
hizo
y
hace la justicia de creer que de parte de US.
I.
hubo la mas sana intencional suponer que la pregunta
y
la con tcstacion privadas, no eran mas que una prueba
de
respetuosct aclhesion
al Gobierno,
y
por lo mismo de·
duce que
S.
I.
no puede acojerse
á
esa respuesta priva–
da, dándole el valor de un
pase
en forma. US.
l.,
por su
parte, tambien manifestó que creía que el Gobierno solo
comprendió que se trataba de la Bula
Quantct cura,
á
consecuencia del oficio
y
publicaciones remitidas el
dia 27.
Si US.
I.
en vez de enviar
á
su Pro-Secretario á pre–
guntar si había algun inconveniente para celebrar el Ju–
bi leo, hubiese remitido el expediente
y
las Letras, aun
sin solicitar el
pase,
el Gobierno habría conocido desde
luego toda la cucstion. US.
I.
y
su Pro-secretario no
pueden dudar que el Gobierno creyó que se trataba de
un Jubileo corriente, no del universal concedido en la
Bula
(Juanta cura.
No deben dudarlo, por la manera
lacónica
y
poco explícita con que se hizo la pregunta,
por los mismos términos de la contestacion, por la sor·
presa con que se leyó el cuaderno que contenía la Buht
y
por la inmediata diligencia que se hizo para que U::l. l.
dispusiera que se suspendiese la publicacion
y
se rcco·
jiosen Jos impresos. Cuando el Ministro habló
á
US. l.
sobre esto, su¡ o que algunos ejemplares se habían dis–
tribuido,
y
se le dijo entonces que la circular habia mar·
ehado en los vapores de Norto
y
.'ur. Es por esto que
en mi anterior oficio cxtraiié que la circular de US.
I.
llc'msc la fecha de 25 de Agosto
y
el oficio pasado ,¡ es-