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nos. Tan notable como Tertuliano en el célebre
Orígenes, hijo del mártir
S.
Leonídas,
a
quien
acompañó hasta el suplicio en la persecucion de
Severo, y
el
discípulo mas ilustre de S. Clemente
Alejandrino; entre sus numerosos escritos son
los mas importantes sus ocho libros contra Cel–
so, la apología mas completa del Cristianismo
que se ha escrito en la antigüedad. Orígenes no
solo refutó en esta obra cuantos cargos se ha–
bian hecho al Cristianismo y destruyó cuanto se
babia alegado en favor de la idolatría, sino que,
adelantandose
á
los siglos, contestó tocl::is los ob–
jeciones que hoy hace
á
la Iglesia la moderna im–
piedad. Finalmente, Arnohio, perseguidor con–
vertido, y su discípulo Lactancio, de admirable
elocuencia, escribieron obras muy notables se–
cundando en favor del Cristianismo los trabajos
de los anteriores apologistas.
Escritos de los apologista§-Cnal.ro
son los puntos principales sobre los que versan
las apologías :
1.o
desvanecen los argumentos
de los paganos contra la persona de Jesucristo,
manifestando que no es absurdo reconocerá Cris–
to como Dios,
y
que sns prodigiosos milagros,
su sublime doctrina, su santidad, vidad y resur–
reccion comprueban su divinidad;
'2.
º
defien–
den
á
los cristianos de los crímenes que se lr s
imputaban, haciendo ver que no son ateos ni
idólatras ; que sus agapes ó banquetes son ino–
centes y que en todas sus reuniones domina un
sentimiento de amor fraternal; 3.
0
prueban que
el Cristianismo es la religio.n verdadera, porque
es la mas antigua, por la pureza y sublimidad de