356 / 404
342 .
VIDA
la oracion de dicho oficfo, la cual es del tenor siguien–
te:
Deus, qui per immaculatam Virginis conceptionem dig–
num filio tuo habitaculum prteparasti; prtesta, qucesumus,
ut sicut ex morte ejusdeni ftlii tui prcevisa eam ab om–
ni /abe prteservasti; ita nos quoque mundos ejus interces–
sione ad te prevenire concedas; Per eumdem Dominum nos–
trum Jesum Christum, &c.
la que traducida á nues–
tra lengua, dice así:
O
Dios, que por la inmact1lada con–
cepcion de la Vírgen preparaste
á
tu hijo una morada
digna de él; te s.uplicamos, que así. como por la muer–
te prevista del mismo hijo tuyo la preservaste de toda
mancha, así nos concedas tambien por su intercesion
á
nosotros el llegar á ti des pues de esta vida, purificados
de nuestros pecados. Por el mismo Jesucristo nuestro Se–
ñor, &c. El papa san Pio V. en 1569 concedió á todo el
órden de san Francisco permiso para poder rezar este
oficio.
El
papa Clemente
VII.
babia ya publiCado con el
mismo fin un Breviario, compuesto por el cardenal Qui–
ñones, en el cual, á mas de la oracion , hay un invita–
torio, que se dice al empezar maytines en estos términos·:
Celebremos la concepcion inmaculada de
María ,
y
adore–
mos á
Jesucristo
nuestro Señor que la preservó.
Fuera de
esto, en los himnos que Zacarías , obispo de
Guardia~
compuso por órden y con aprobacion del papa Leon
X.
y
de Clemente VII. se dice que la santísima Vírgen
fue
criada en estado de gracia. Los papas
Al~xandro
VI.
y
Adriano VI. aplaudiéron mucho el que algunas comuni–
dades religiosas se intitulasen de la órden de la Concep–
cion inmaculada de la santísima Vírgen,
y
la honráron
con muchos y muy particulares privilegios. Pocos papas
ha
habido despues de Sixto IV. que no hayan concedido
muchas indulgencias
á
las cofradías fundadas baxo
el
título
y
advocacion de la inmaculada Concepcion,
y
con
motivo de esta fiesta. El erudito padre Antiste, domini–
co, hace mencion de un órden de religiosas, fundado en
honra de la inmaculada Concepcion de la Reyna del cie-
10,
con la autoridad del papa Inocencio
Vlll.
y
confir–
mado despues por Julio
U.
por ·un breve del año
1
s
r r
el
17
de septiembre. Este Papa en la regla
que
dió
á
dichas religiosas, despues de haber dicho en el capítulo
primero, que
las
que
entr¡rn
e~
1
esta
órden
pretenden