DESPUES DE PENTECOSTES.
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diese responderle
á
la pregunta;
y
desde aquel dia ningu–
no se atrevió á preguntar le nada.
La oracion de la
mi.rae.r la .riguiente.
Da
,
qure.rumu.r
,
D úmine
,
po–
pulo tuo diabolica vitare con–
tagia: et te .rolum Deum pu–
ra mente .rectari: Per D<Jminum
no.rtrum...
Señor, concede
á
tu pueblo que
evite el contagio del demonio ,
y
que no sirva ni siga
á
ótro que á ti:
Por nuestro Señor Jesucristo...
La epi.rtola e.r del cap.
4.
de 1an Pablo
á
/01 de
Efe.ro.
Fraires: Ob.recro vos ego vinc–
tu.r in D omino
,
ut digne am–
buletis vocatione
,
qua vocati
eui.r, cum ornni humilitate,
et man.ruetudine' cum patien–
tia
,
supportante.r
invicem in
charitate, soliciti servare
uni–
tatem spiritus in vinculo pa–
cis. Unum corpus, et unur spi–
ritu.r
,
.ricut vocal i est is
in
una
spe vocationis v estrce. Unus
Dominus
,
una
fides
,
unum
h.iptisma. Unus D eus, et
Pa–
ter omnium ,
qui
est super om–
ne.r
,
et
per omnia, et
in
om–
nibus nQbi.r.
Qui
e.rtbene–
dictu s
in siecul"
.rizculorum.
Amen.
Hermanos: Os ruego yo , encar–
celado por el Señor, que camineis
dignamente en la vocacion con que
habeis sido llamados , con toda hu–
mildad
y
mansedumbre , con pa–
ciencia, sobrellevándoos mútuamen–
te por caridad, cuidadosos de guar–
dad la unidad de espíritu con el
vínculo de la paz. Un cuerpo
y
un
espíritu , así como habeis sido lla–
mados
á
una esperanza de vuestra
vocacion. Un Señor, una fe, ur1
bautismo. Un Dios,
y
Padre de to–
dos , que es sobre todos,
y
por to–
das las cosas , y en todos nosotros.
El cual es bendito por los siglos de
los siglos. Amen .
NOT
.A.
((Los de Éfeso, antes de haberse convertido
á
la fe
"de Jesucris to, e taban muy entregados
á
sus pasio–
"oes ,
y
divididos entre sí con contínuas enemistades
y
''di cordias. San Pablo los exhotta mucho
en
esta
car–
" ta
á
la mortificacion de las pasiones ,
y
á
la
union
y
ca–
" ridad fraterna.''