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DESPUES DE PENTECOSTES.

9

Hic peccatores recipit

,

et manducat cum illis

~

Este

hombre , decian los fariséos , recibe á los pecadores ,

y

come con éllos. Esto era todo lo que tenían que echarle

en cara al Salvador aquellos hi p6critas. Jesucristo para

confundirles les responde con una p<irá.bola en

~orma

de

raciocinio, á la que no saben qué replicar: se compara el

Señor á un pastor que corre tras una oveja descarriada:

á

una muger que busca solícita una dracma que ha perdido,

y

á

un padre que llora los excesos de un hijo libertino.

Los pecadores comparados

á

esta oveja descarriada tras la

que ·se corre,

á

esta dracma perdida que se busca con

tanta diligencia, todo esto justificaba admirablemente su

conducta ,

y

llenaba de confusion la falsa delicadeza de

los fariséos.

Quis ex vobis homo, qui habet centum oves?

El

razo–

namiento del Salvador es concluyente

á

todo sér ,

y

no

tiene réplica :

i

Quién de vosotros , les dice, si tiene cien

ovejas,

y

pierde una, no dexa las noventa y uueve en el

desierto ,

y

va á buscar la que ha perdiélo hasta que la

ep.cuentra? Esta oveja, dice san Agustín.,. se babia perdi–

do élla misma , saliéndose del redil,

y

siguiendo sus ex–

travíos ; pero no podia volver al redil si la misericordia

del pastor no la hubiera buscado. No hay pecador que

no oiga en el fondo del corazon la voz de aquel

Dios

de bondad que le busca , que le llama, que le convida,

y

le

solicita á que vuelva

á

él; pero cuando uno está con

gusto en sus extravíos, dexa gritar al pastor que le llama,

y

solo halla gusto en extraviarse siempre mas

y

mas.

iPero es unó dócil á esta voz?

i

vuelve á entrar en su de–

ber? ¡Qué gozo, dice el Salvador, para el pastor cuando

vuelve á encontrará

Ja

oveja descarriada! Tiene gran

cuidad\ de no maltratarla: en lugar de encaminarla hácia

el rebano,. quiere ahorrarla el trabajo de la vuelta;

y

pareciéndole poco el trabajo que le ba costado el buscar–

la, la carga él mismo sobre sus hombrns. ¡Qué

bien

se

pinta el Salvador en esta figura,

y

qué bien hace aquí su

retrato!

Et veniens domum, convocat mnicof et vicinos,

dicens illis

:

Congratulamini

f'flihi,

quiq

inveni ovem meam,._

qttte

perierat:

Y luego 'lue llega á casa, junta sus amigos

y

vecinos

1

y

les dice: Dadme la enhorabuena, porque

he

hallado aquella oveja mia que se babia perdido.

i

Qué os