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VIERNES

TERCERO

recer tan ligeras! Siervos de Dios, ministros del SeñQ'.r

almas prevenidas-con sus bendiciones

~

personas

religio~

sas, ahora no hacejs caso de ciertas pequeñas observan–

cias, de ciertas reglas ligeras: mirais como menudencias

ciertos puntos de la ley; cuya omision no puede ser pe–

cado grave: tratais ".de ·escrúpulo la puntualidad en obe–

decer

Dios en las menores cosas

:.un

dia sabréis de cmán

fanesta consec:Ü1€nda habiiá sido Yuestra"ipoca fidelidad:

Y

quiera Dios que·fa exclusion de la

~ierra

de promision,

respecto del

l~gislador

y del conductor

del

pueblo

de

Is:–

rael, no sea µna figura de la repr.obacion c:le tantas

al·

mas .preveqid<:is de ·;iantas ,gracias

~a~i,· desde

la .cuna, 'col–

madas en.; adelante ·de

ta.n~os

dones ; -privilegiadas

pe>t

los

:empleos ~ • y

escogidas para

con~ertir

á·tl>tros:JMoyses

hi'é~

i"e

la

piedTa,

Y'

sale

q~

élla 1foa:1füerite. Por imperfectos

que seamos, no <:texa de ' servirse Dios ·de nuestro minis–

terio para hacer marav·illas. lJn director laxó, poco re–

.gulqr,

y

que

ria

·practiea

lp

r

que

0rdena

:los que

diri–

ge. ;

néK.1dl.e-xa:

dmcolidúai'Vra

!la

pér:feccion

a

aquellos que

Di0s

lia

1

,enc03!.íl'H~ad.ador

á;

sus.cuitladoS'.; un "predicador po·

co dev-o-to ·puede ablandar los corazones hasta hacerles

derramar lágrimas:

h

ere

-Y

saca agua de una piedra, aun–

que él mismo eslé quizá .poco penetrado de las grandes

verdades .que ;p're

·di.ca

.

Ua

p~dre

tle1

familias, un maestro

pu_eqe .

c<;>r~e~iv rel

vicio:len ·aquellos- que

le

es~an

1

sujet<;:>,s

1

aunque

el_"

sea'

~lilf 6 m©delo ·

muy

pe.twerso. As1 saca Btos

su

glorfa"de la misma nada:

i

pero acaso no_. se encuen–

tran

ya

mucho·s_de estós

hom~res

puestos para conver–

tir

á

los 6tros,

á,

.quienes

diga:

Dios:

Porque n°"me habeis

;Síllntificado-

·

d~a'f.fte:J

de

él/os,;:

no

_introduciréis este

pueblo

én

iJa.tier:ra · que, ,Yo les

dáré~ ·

¡_0xála no se ·encontráran

t antos!

El

evangelio es

del cap.

4

de san Juan.

Jn

~Ílo

t e'mpore

:_

~énit

Jesu.r

ín "

.Eti

aqu~l

t.iempo: Vino Jesµs

á

una

civitat

m

Stnrtarite',

iqu.e

déci-

ciuda"d de Samaria, llamada Skar,

:tur

,'<' f5ic~ar,

fuxta

pi~diúm,

ju nto

á

la hereda:d que di6 Jacob

á

quoíl de'dit-

1

Ja;

có-

'!fóseph

filio

su hijo J osé. Estaba allí el pozo de

suo. Erat

au'tem-

ibi fans

Ja-

J acob.

J

esus, pues, fatigado del ca–

_cok.

Jes-µ,s~ erg.o

fatigatus ex

'.mino, se sént6 así junto al pozo.

itin,er_e'; ¡ede..llAA

si'<; '

supr,rfM~

Era cerca .de

fa

ho ra de sexta. Vine