![Show Menu](styles/mobile-menu.png)
![Page Background](./../common/page-substrates/page0116.jpg)
102
TERCER DOMINGO
blaros en pesona; estoy. seguro , que sin·que paseis mas
.adelante, podeis con una sola palabra curar
á
mi
criado.
Vos.
no recihis órdenes de nadie, porque nadie hay sobre
vos: bien se ve que toda la naturaleza os obedece como
á
su soberano dueño,
y
yo
estoy cierto de que no hay en-, .
fermedad alguna que vos no ahuyenteis con una sola pala–
bra.;
pues.
yo
que no tengo. sino una autoridad subordina–
da , me hago obedecer de mis inferiores
á
la menor insi–
nuacion de mi voluntad;
i
con cuánta mas razon, pues,
encon~raréis
vos suj_etas
á
vuestra sola palabra todas las
cosas.
Este discurso agradó tantó· al Salvador, que· no pudo
dexar de· manifestarse admirado.
No
es esto decir que la
ad.miracion que mostró. procediese de ignorancia, de pas- .
mo
ó:
sorpresa, corno, sucede en nosotr
~-
pues lo sabia
y
preveí'l: todo.,
y
nada podia hacerle nov
~ad:
era, sí , un
efecto de la extremada sastisfaccion que tuvo de la fe de
este o.ficial romano; lo que le hizo decir
á
todo el pueblo
q '':".
le· seguia :.
En
verdad que n0: he hallado fe tan gran–
d
,
~;.!odo
Israel enninguno de·aquellos
á
quienes h- hecho
mas beneficios,
y
que estan mas obligados
á
creer
y
espe–
ra.r en mf :- no por cierto; no es tan firme vuestra fe como
la de este
cx.trangero~
El
Hijo de Dios hablaba de los que
estaban presentes, y de todo el pueblo judío. Se debe ex-
...
ce.~1t:uar
de esta generalidad María santísima, san Juan
Bautista, los apóstoles;
y
esta excepcion no quita que la
fe de
~ste
extrangero fuera capaz de confundir la incre–
dulidad
de la
nacion judáica. La grandeza de esta
fo
hizo
que
et•Saivador añadiese, que tuvieran por cier to, que
muchos vendrian
de
las extremidades del Oriénte
y
del
Oc–
cidente, y se sentarían con Abrahan, Isac
y
Jacob en el
reyno de los cielos., gozando de las. delicias· de un ban·
quete eterno, miéntras los hijos de la casa, que po·
é:iian aspirar
á
las primeras sillas· de este reyno, como
á
puestos que estaban destinados- para éllos con prefe–
Tencia
á
cualesquiera ótros, serian desheredados
y
arro–
jadbs
al
abismo, donde jamas. verian la. luz , donde no
habria para éllos sino,lágrimas.
y
crugir de dientes·. Lo que
el
Hijo. de Dios. les dixo- en estas· palabras, denota con
bastante claridad
la
vocacion de los gentiles,
ros
cuales por
su docilidad en
recibir
el
evangelio,
merecerian
ser subs-