DESPUES DE PENTECOSTES.
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fables b.eneñcios
!
¡
Quan pocos son sensibles al exceso del
- amor que nos tiene! A fuerza de oir hab1ar de la crea–
cion, de
la
encarnacion , de la redencion, del sacramen–
to ·de la Eucaristía
nos
acostumbramos
a
estos términos,
y a
Ja.s cosas que significan; al paso que no hay hombre,
como no haya perdido el juicio, que no se sintiese trans·
portado de amor,
y
del mas vivo reconocimiento
a
otro
hombre, de quien supiese haber recibido la centésima par–
te del menor de estos favo res . Aunque este Dios hombre
no nos _hubiera querido redimir, no p@r eso hubiera si–
do ménos santo, ni ménos ·poderoso, ni ménos feliz·; con
todo, ba tenido tan en su corazon nuestra salvacion, que
al ver solamente lo que ha hecho , y el modo como lo
ha
hect.to,se iria que toda su felicidad dependía de la
nuestra : pudiendo red imirnos
a
muy poca costa , quiso
merecernos la gracia de la salvacion, muriendo en una
cruz entre los mayores tormentos
e
ignominias; y pu–
diendo aplicarnos
~e
mil modos sus merecimientos, eli–
gió el que le costaba·mas: eligió aplicárnoslos por medio
de una humillacion tan prodigiosa, que asombró al
cie–
lo'
a
la tierra
ya
toda la naturaleza.
y
todo esto lo hi–
zo para _mover
y
atraer
a
sí unos corazones naturalmen·
te sensibles al menor beneficio
y
a
la menor demostra–
cion de amistad. Un nacimiento pobre, una
vida
laborio–
sa , obscura , unas humillaciones llenas de oprobrios, una
muerte la mas infame
y
dolorosa son maravillas que apé–
nas .
po~emos
creer que un
hom~re
Dios
haya pasado por
ellas; y sin embargo, estos. son Justamente los efectos. del
amor que nos tiene Jesucr1sto•.
i
Por ventura se conoce en
el cristian ismo la altura, la latitud, la profundidad in–
~onmehsurable
de esta incomprehensible caridad de Je–
sucristo~
No podemos ignorarla: esto ·sería ignorar nues–
tra religion , la que- está fundaga sobre esta caridad de
Jesucristo;
y
si la conocemos,¿ como podemos amar tan
poco
a
Jesucristo~
El evangelio es del capítulo
14
de San Lúcas.
In illo témpore
:
Cum
intra:ret
Jernt in
domum
cujúsdam
prlncipis pharis&e6rum sábbato
man-
En
aqael
tiempo:
Habiendo en–
trado J esus
un
s:ibado en la casa
de
cierto
príncipe
de
los
fari seos
ª