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DEVOTOS..
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t-e-
con mucho respeto
á
la Misa mayor,
y
si pudie–
res, á tod as las horas del Oficio Divino; visita
á
Je–
s-u-Christo
en
la persona de los pobrns , en el hospi–
tal,
'ó
en l¡s cárceles,
y
procura aliviarlos
y
soc r–
rerlos con tus limosnas; pasa,
á
lo menos, media
ho~
ra
por la tarde, á los pies de Je u-Christo Sacramen
t ado, meditando el gran Misterio de este dia; procu..:
ra
renacer el día de hoy con el Salvador, convirtien...
dote en un hombre enteramente espiritual , despren–
dido del mundo, muerto
á tí
mismo;
para no vivir
de hoy en mas , sino en Dios , por Dios,
f
de Dios.
-~·~=!~=:~=~~~=~====~
j
DIA VEINTE Y SEIS.
San Esteban, Profa-Mártir,
ó
el
primer Mártir.
·
S
An
Esteban, que tuvo la dicha
y
gloria.
de
dar'
el prirpero-su sangre
y
su
vida por Jesu-Chrf.sto,
era Judío de origen , aunque quizá Griego de nací-·
miento. Se ignora su patria
y
sus padres; ·solo
~e
sabe
que le habían criado en la escuela del famoso Doétor
de la Ley, Gamaliél, discípulo oculto de Jesu-Chris–
to , con Saulo ,
y
que babia salido hábil en la ciencia
de la Ley
y
de las Escrituras , por la excelencia de'
su ingen io,
y
por su aplicacion al €studio. En su ju–
ventud se distinguió de los demás por la pureza de
sus costumbres ,
y
pqr una regularidad de conduBa
poco comun.
San
Epifanio cree que era uao
de los ·
se-
Dia XXV.