•
124
EL LIB_llO DE LA SABIDURIA.
male iurantes noceri se non spe–
ran t.
30 Utraque ergo illis eve–
nient digne , quoniam male
senserunt de Deo , attenden–
tes idolis ,
et
iuraverunt iniu–
ste, in dolo contemnentes iusti-
tiam.
•
31
on enim iu ratorum vir-
tus, sed peccantium
po~na
per–
ambulat semper iniustorum prae–
v
aricationem.
• No temen ni se persuaden que se–
ran
castigados por
SUS
perjurios.
2
En el dar cul to a los !dolos.
a No serin los ldolos los que los cas–
tiguen por sos perjudos , porque no tie–
nen virtud ni poder para ello : mas aque-
rando malamente esperan
x
que
no recibiran daiio por ello.
30 Mas por lo uno y por lo
otro tendran su merecido , por
quanto sintieron
2
irnpiarnente ,
de Dios, reverenciando
er
los ido–
los,
y
juraron sin justicia, rnenos–
preciando con dolo
la
justicia.
31 Porque no la virtud
de
aquellos por quienjuraron
3,
sino
la pe'na de los que pecan es la que
anda siempre en pos de la preva–
ricacion de los injus£os.
lla justicia vengadora de todas las ofensas.
1
que se le hacen , estari siempre en vela
para castigarlos ' ya porque juraron en
falso , y ya porque lo hicieron por los
dioses falsos , dindoles un culto que es
debido unicamenre al verdadero D ios.
C A P I T U L 0 XV.
El Sabio alaha al S enor
,
por haber preservado a Isradl de la
ido- .
/atria.
M enosprecio de
qite
son dignos los fdolos.
I
Tu
autem , Deus
~oster,
suavis et verus es, patiens , et
i n misericordia disponens om–
nia.
2
Etenim si pe&caverimus,
tui sumus , scientes magnitudi–
nem tuam : et si non peccave–
rirnus, scimus quoniam ap1*te
sumus computati.
3 N osse enim , te consum–
mata iusti tia est : et scire iusti-
1:
Si pecamos , sabemos que estamos
en tu mano ,
y
que nos puedes castigar o
perdonar segun tu miseri cordia . Y si no
pecamos , sabemos que nos cuentas por
I
Mas
tu , Dios nuestro,
benigno eres
y
verdadero. , pa–
ciente,
y
que ordenas todas las
cosas con misericordia.
2
Porque s· pecaremos, tu–
yos somos
1
,
conociendo tu gran–
deza : y si no pecarernos , sabe–
mos que tu tienes cuenta de no–
sotros.
3 Porque
e.1
conocerte a
ti
2
,
es la justicia consumad_a
J
y
el
tus amigos ,
y
participantes de tus gracias.
2
Por
fe
viva, de manera que te ame–
mos y adoremos. Este es el propio caric–
ter del verd adero justo.
Romano
I I 1.
i.8.