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fuese notoria su santidad: pues, aunque {:Ualquiera fiel será san–

to delante de Dios, y glorificado en la Iglesia triunfante, si

perseverase hasta la muerte en la justicia, segun estas pala–

bras contenidas en el capítulo

'2.

0 ,

verso

1O

del Apocalipsis:

Sé fiel hasta la n•uerte,

y

te daré la corona de la vida,

conducen'.

mucho esas gracias, para que, á lo meuos indirectamente,

¡y

supuesta la héroicidad de las virtudes, repute santo la Igle–

sia militante al que Dios manifiesta ser su favorecido y estar

adornadm de ellas.

El apóstel San Pablo en su primera epístola

á

los Corintios,

capitulo

12,

menciona estas gracias diciendo:

A iino es dado

por el espíritit palabra de snbiditria:

á

otro palabra de ciencia segun

el mismo espíritu:

á

otrv/ (e por el mismo espíritu:

á

otro gracia de sa-

.

nidad en un mismo espíritti:

á

otro operacion de virtttdes:

á

otro pro–

fecía:

á

oh·o d.:Screcion de espíritu:

á

otro linages de lenguas: ií otro

interpretacion de Jlalabi·as. .Mas todas estas cosas obra solp uno

y

el

mismo espíritu, 1·epartiendo

á

cada ttno como quiere.

Y

no pudien–

do dudarse de que Dios concedió todas, ó la mayor parte, de

estas gracias

á

fray Martin, trataré de ellas segun el órden en que

las colocó San Pablo;·y luego de los éxtasis

y

raptos, porque al–

gunos sabios los comprenden entre las gracias gratis riadas.

ARTICULO PRIMERO.

GnACrAB DE SA.BIDUl\IA y

CIEl\'CIA.- Al hablar de estas gra,cias,

debe saberse que son distintas de Jos dones de sabiduría

y

ciencia que infunde el Espíritu Sl!uto, pues estos suponen ra-

, dicada la caridad en el alma,

y

las gracias gratis dadas, como'

se ha dicho, pueden recibirse sin ella para provecho de los .

prójimos. Los dones de sabiduría y ciencia son habituales; pe–

ro las gracias gratis dadas, son las mas .veces, particulares mo–

vimientos é inspiraciones del Espíritu Santo, para inst1'uir

y

ex.citará otros. Por el don de sabiduría es el alma ilumiuada

sobrenaturalmente, para contemplar los di vinos misterios con

firmísima creencia

y

seguridad de todos ellos, gustando suaví–

sima dulzura al contemplarlos; y por el de ciencia, se eleva

mediante las criaturas visibles

á

la contemplacion de su

Criador.

·

No debe entenderse lo mismo de las gracias gratis dadas de

sabiduria

y

ciencia; pues estas consisten principalmente en la

eficacia

y

nncion de la palabra. Por eso no dice el Apóstol:

A uno se da la sabiduria, á otro la ciencia,

&,

sino:

á

uno

se

da palabra de sabidwria,

quiere decir, es movido y se le da

facultad de instruir á otros en los divinos misterios:

á

airo