-1-1-6-
nota
en
mucha .
ellfel'lllt3
lades,
en
la,; cuale
á
veces las
fUN iO!l('FI
11 r.ntale. cambian en
u
lirios por razou 'de la fuerza
tic
la, '¡1,ngre
~l1bre
el oer ro en la
ti
bres agu(1n.s;
3
0
'egun
10-
olima; en lo ,
dilll:1 '
c'Llioutt' .
el cuerpo
goza de
ULla
fli.erz~L
mas
cnérgi
';1,
par~
t' xit,1,r al alU1¡t que en los climas heladoi:!' e ob crva
Cll1
en Jo
que vi\'en en+ug,u'es altos que dominan dilatada . ampiña', la.
fuerza. d exmti1c.ion e' mayor que los que -vi en en boudof.>
va,ll ('s~
mayol'ln ente si estos estan cargado:; de deil. os vapor
'S;
,1~
.'eguu
-el
teuJporamonto, unos tienen una imaginacion ma viva qu ,
otros; uno, son ma reflexivos que otro; unos muy lento
ClJ
juz–
gar, otros muy precipitados, etc.
El cu 1'pO influye de diferente modo en la
acth~ida~l
del al–
ma, scguu la edad, los estados, el clima
.r
el t
mpeI'am~nto.
XII.
Sitio
domle
reside
el
alm&!o
Descartes coloca al alma eula glándula piucal' BuffoH en la
membrana que cubl'e el cerebro; en la antigüedad Demócrito di–
I::lecaba cerebros tle :tnimales, para hal1a,r en el hombre el aaieutú
ue
la locura, Erasistrato formuló el si t.ema que hace
á
la oí r–
c llnvolucinn~s
eerebr:?les el asiento ele las facultades intelect.uale',
:l-aleno co 'oc6 el a. iento de esta' en los ventrículos del oerebro,
Alberto
ul
Gl'anle seguia
{t,
Galeno reduciendo la tales fatmltatle'
pJ~'
:__
,~;
formas exteriores del ráneo. San Agustin, Santo Tomá.',
y
lo aristotélico;::, enseñan que el alma racional está torla en todo
el cno1'po y toda en cualquiera parte del mi, mo, porque cada par–
t e del cuerpo hllIDano está informada, vivificada
y
animada su '–
tancia.lmen te por el alma racionaL Además siendo el alma una
:-3ut3tancia simple y puramente espiritual no puede ocupar un lu–
gar dete rminado como un cnerpo que consta de parte ',
y
por con–
siguiente deextension ó cantidad que exige un lugar proporcio–
nado. El alma segun la totalidad de e encia existe toda en to–
do el cuerpo,
y
toda en cualquiera de sus partes: 'en crlanto
á
la
totalidad de virtnd, existe toda en todo el cnerpo, y la parte en la
pa,rte; . g. en cuanto
á
la facultad de ver, está en los ojos, en
cuanto
á
estas ó aquellas pasiones, en el corazon, en ruanto
á
la
'imaginacion, en el cerebro, y así de las demás facultades que fun–
cionan por medio de órganos determinados del cuerpo, en el seu–
t·ido e plicado por Santo 'romás.