Table of Contents Table of Contents
Previous Page  275 / 712 Next Page
Information
Show Menu
Previous Page 275 / 712 Next Page
Page Background

/

-

,

GI:OUIA

269

~

_cStñores, ninguna voz más desautorizada

que la mía,

par~

dirigiros la palabra. Joven,

sin experiencia, sin conochnientos, me falta

autoridad. Válganme por las prendas de que

care~co"

mi ácendrada fe, mi sincero amor al

"

-

catolicismo,_ ios esfuerzos que hice en mi limi-

-

-"

tada esfera para conseguir, el triunfo práctico

de la Iglesia, de esa amorosísima

Madr~

nues·

tl~a ;

por

q~lien

-vivimos, por quien alentamos,

por quien réspiramos. Dios ha, querido que el

más indigno de sus soldados , "el más peql1efio

<;le sus: servidores, alcance hoy un t riunfo ma–

teri~l

en las contiendas que han "establecido

los inicuos. Él me dé fortaleza. para defender–

le; Él dé

á

mi labio energía,

pod~r

á

mi cora–

zón, vigor

á

mi espíritu.

Estote ergo

j ortes

in

bello:

,Sed fuer tes en la guerra.•

-.Inmensa, asquerosa, pes tilente lepra

cubr~

el cuerpo social. El llamado

espíritU,

modernl!,

dragón de cien deformes cabezas; lucha por

derribar el estandarte de la cruz. ¿Lo permitire–

mos? De ninguna manera. ¿Qué valen algunos

centenares de inicuos depravados contra la

mayoría de una Nación católica? Porque no

sólo somos los mejores, sino que somos los

más. Alcemos en esta Cruzada el glorioso es–

tandarte, y digamos: cAtrás, impíos, malva–

dos sectarios de Satanás, que

cODtra~

el reino

l

l