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ti
nrns de un 50 del que
luvo ;rnlPs
dd
con!
1'<1!0
o
n101tn ···
polio.
Se nos ha acus·ado de frmulcs,
1)1:0/encias
y
ultrajes a
lo.~
U<!ndedores del artic11lo,
sin t¡uc ni
t'SI
inrnlados por li..is
in<lcmnizr,cioncs
que hcrnos
ofrecido, hap
osado alguno
1wcsenlnrsc n prolrnrnns un solo hcdio de esta clase .
.Se nos ha acusado
(se entiende hajo del anónimo ) de la
pl:mlidn de un
lihro
de conl'rontaeíon de
(Juias o eslrac–
ciones
que <lehia llevarse en la prefectura del dep:lrtamcn–
to,
~<como
si
nosotro~
hnbicramos sido los
guardiélncs
de
su
archivo, ni
nos
importase~
la falla o
cxislcncin
de seme–
jante libro,
corno t;unpoco
le
importaba
<11
Gobierno
,n
puesto
que
~11
misn10
objeto se
llevan otros
tres corrclali–
·rns en léls provincias, puente ele
~asacara
y
en
la
achrn–
rnl
principal de
la
P<iz.
Se nos
ha
ncHsatlo
<<de
cohecho
y
s1>borno
:1
los funcio–
narios públicos
y
(ltHl
a las primeras autm·i<fodcs dcpart<1-
nwnlJles
y
nacionales,
n
sin
mlrnrlir
11ue por calumniar–
nos a nosotros,
cJlumniaban
larnhien
y
hmnill:1ban
~
cnvilecian a toda la
niicion
representada en ¡u¡ueHas. Pero
esta
acusacion
ya
carece
de
valor en Bolivia, por la frccucn –
ciíl con que se lince a lo1los
los
<]IW
ocupan algun
puesto.
Se
11os
ha acu.rndo
<{de
<¡ue
en los
fardos de cascarilla
>>cuyo
enfardelo
y
rctoho librado a indíjcnm;
l1111nildcs, }
1)
CU)'<I
conduccion es de
una
notoria lcnlitud ,
remiliarnos
't•
paquetes de correspondencia al
cx-prcsidcntf;
HalliYÍélll
>1
sin
advertir,
que
t:u1
torpe
y
ridícula
cahnnnia
daba una
idea rnui
1nenguada
de las
garantías que
el
Gobierno pres–
lnha a la
correspondencia
del comercio
rwcional
~'
cslr:m-·
jero. Sin
ernlwrgo de
la ridiculez
y
torpeza de semejan'.e
l'alunrnia, ella se halla consignada en
docmucnlos
judicia–
f<¡s publicados por Ja prensa en un periódico
oficial.
Se nos ha acusado
«que hiljo la
mi1rca
socinl se
lwn
cm-