DE LOS FENICES.
atrevido, ni me atrevo a exponer mi traba–
jo. Las que se creen de Cartago en que se
ve una cabeza de caballo : no tienen regu–
larmente sino una letra, que suele ser un
//leph
a este modo
1';
en otras un
M em
'f/,
cuyo significado no es facil de entender.
Una tengo de oro hermosisima mui peque–
ña sin letra alguna , con sola la cabeza de
Caballo y al lado tres puntos que pueden
significar el valor que en su tiempo tuvo;
y en el reverso una palma. Va en la La–
mina siguiente num. r.
*
g:::f
Veanse en la //dicion que va al fin de
este Escrito mis nuevas congeturas sobre
las Monedas de Cartago
,
con ocasion de
una que acaba de llegar a mis manos.
M
Pellerin
trae una moneda Latina de
esta Ciudad , del G av'inete del Conde de
Schmettau
(a} ,
en cuya haz se lee al derre–
dor de las cabezas de dos varones joven<:s, la
inscripcion : ARISIO MUTUMBAL RI–
COCE SUF, esto es SUFETES, como
se llamaban los Magistrados de Cartago; y
en el reverso al derredor de la fachada de
un templo de quatro colunas : VE NERIS
KAR : la qua! me hizo acordar de que en–
tre mis monedas havia otra semejante ;
y
haviendola cotejado , hallo que es la mis–
ma en todo y por todo en quanto al typo;
pero en la leyenda hai bastante diversidad.
E n la haz , solo la segunda I del ARI–
SIO, que en mi moneda es claramente una
T , cuya linea transversal pudo estar ocul–
ta en la original, o pasarsele al D ibujan–
te o G ravador; pero en el reverso , en 1ugar
de : VENERIS KAR, como se lee en la
moneda de
M. Pellerin :
en la mia esta
claro: VEN COL KAR. esto es : VENE–
RIS (templum ,redes) COLONIA CAR–
THAGO; lo que alude a haverla Julio
Cesar ennoblecido con este titulo , segun
refiere Plutarco
(b},
y
dadola su nombre,
que aun se conserva en algunas de sus mo–
nedas
(c},
y el distintivo de ANTIQUA,
para que no se confundiese con nuestra
Car/hago-nova.
Por esto he creído conve–
niente,copiarla, como va en la misma la–
mma num.
2 .
En las monedas Numidicas
y
M aurita-
nicas de Iuba el Padre ,
y
el Hijo, de Bo–
coy otras de esta clase, que trae copiadas
M . Pellerin
en
el
tercer T omo de su
R e–
cueil (d)
:
no me he resuelto a emplear mi
trnbajo , sin embargo de tener muchas de
ellas originales a la vista. T engo poca es–
peranza de conseguir su verdadera leyenda
e interpretacion ;
y
por ahora aun menos
tiempo para detenerme en esto. Por cuya
razon me contento con poner en la La–
mina en que va esta clase de monedas , so–
lo aquellas en que hallo alguna diversidad
respeto de como están en la coleccion de
M . Pellerin ,
notando lo que falta o sobra
en su copia;
y
en ultimo lugar pongo tres
monedas , una de Iuba el Padre,
y
otras dos
inciertas: la primera de las quales es segura–
mente Africana , la otra lo parece
y
puede
mui bien serlo ; pues ninguna de ellas he
visto en dicha coleccion ;
y
creo que ni es–
tén en parte alguna publicadas : todo con
el fin de que los que quisieren aplicarse a
este estudio , tengan esos mas presidios ,
y
cabos a que asirse en una vereda tan dificil,
y
de tantos precipicios.
La moneda pues que va copiada al
numero 3. pretende
M. Barthelemy
que sea
del Rei Boco;
y
que en sus quatro prime–
ras letras , que tiene por las Hebreas: wp:i'>
se lea su nombre:
L ibocús ,
en caso de D a–
tivo , el qua! corresponde al G enitivo de
los Latinos:
Bochi (ad M . O!ivier.
p.
42.J;
pero
M . Swinton
quiere que pertenezca a la
Ciudad de Leptis ,
y
que en las mismas
quatro Letras se exprese el nombre de ella.
~ien
quiera ver la contienda de estos
Autores
lea a
M. Pellerin
en dicho T o–
mo 3.
(e}
el qua! copia tambien esta mo–
neda , pero la primera letra de su segunda
linea en su copia es muí diferente de la
mia ,
y
alli se parece a un
M em ,
o a un
Samech
a este modo
u.¡ ,
pero en lugar del
diente del medio tiene un pequeño circulo;
en la mía esta como se ve en su copia.
L a moneda del numero 4. esta bas–
tantemente fiel en
M. Pellerin (/)
:
solo
que en el reverso de la mia se hallan las
dos PP. que no están en aquella.
La del numero
5.
es
conf~rme
en to–
do a la que
M. Pellerin
copia en la la-