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y

persecuciones' aquí, sorpresas allí, tiroteos

y

refriegas todos

los dias, cruzan al Norte y del Norte al Sud y al Este, y por

toda la República hasta el 5 de Setiembre que se presentan ya

con un número regular de fuerzas en el cerrito de la Victoria,

en las mismas barbas de Montevideo, pasando en seguida

á

dar

la batalla de Severino.

En todo este tiempo, los miembros del Partido Nacional se

habian agitado de una manera estraordinaria. En Buenos Aires,

D. Federico Nin Reyes, Tomé, Palomeque, Lerena, Palacios,

de las Carreras, Cortina, Golfarini, Belaústegui y los demás

amigos del General Aparicio, trabajaron sin descanso haciendo

propaganda para la revolucion y buscándole gente y recursos

habiéndose formado entonces y despues varios comités con este

objeto, que fueron representados por las personas mas conspi–

cuas del partido, entre otras los señores Tomé, Belaústegui,

General Moreno, Coronel Palomeque, Lerena, Vedia, de las

Carreras, Camino, Golfarini, Susviela, del Castillo, etc. En el

Estado Oriental y Entre-Rios otros amigos hacian iguales tra–

bajos.

Por otra parte, los mismos que al principio estaban en contra

de la invasion, dejaron de estarlo inmediatamente que ella se

efectuó, y no se pensaba mas que en ayudarla, reforzando á la

revolucion. El Gobierno de Montevideo hizo el resto: enfure–

cido por la audacia del General Aparicio y sus repetidos triun–

fos, creyó que persiguiendo, encarcelando y asesinando

á

sus

adversarios, como ya lo hemos dicho antes, concluiria con la

revolucion , dándole este procedimiento siempre infame, resul–

tados contrarios á los que él se proponia. En los departamen–

tos en que se hicieron mas notables estas persecuciones, fueron

en el mismo Montevideo y en Mercedes, siendo ·jefes polí–

ticos en el primero el Coronel D. Manuel Pagola y D. Trifon

Ordoñez en el último.

En este intérvalo tambien se les habianincorporado

á

los revo–

lucionarios el General Manduca Cipriano , los Coroneles Basilio

y Doroteo Muñoz, Puente , O livera,

uñez, P er yra, Senocien,

hal á, Mena, Saavedra, Guzman, Zipitria, Ba añez, Moro ini>

Saura, Urtubey, Trias Garcia,

astro, l\tiuni z, Galvan, Lacalle'

Polanco, Martinez, y los Comandantes Mesones, Linare , Alva–

r ez, Gastan, Llupez, Lavalle, Portillo, E quivel, !barra, Espiga,

Borchez, Marfetan, Carne , Caballero, Camesilla, y tantos otros

que se habian pronunciado en sus respectivos departamentos y