38 / 96
La confesión
S. LUCAS 9
de Pedro
54
Mas él, tomándola de la mano,
dijeron: Despide á
las gentes,
clamó, diciendo: Muchacha, leván-
para que, yendo á
las aldeas y
tate.
heredades de alrededor, procedru;.
SS Entonces su espíritu volvió, y
á alojarse y hallen viandas; porque
se levantó luego: y él mandó que
aquí estamos en lugar desierto.
le diesen de comer.
13
Y les dice: Dadles vosotros de
56
Y sus padres estaban atónitos;
comer. Y dijeron ellos: No tene-
"á
los cuales él mandó que á
a
M t. 8. 4.
mos más que cinco panes y dos
nadie dijesen lo que había sido
pescados, si no vamos nosotros á
hecho.
comprar viandas para toda esta
compañía.
CAPÍTULO 9
14 Y eran como cinco
mil
hom-
y
bJUNTANDO á sus doce dis-
b
M
t.
10. 1.
bres. Entonces dijo á sus discí-
cípulos, les dió virtud y po-
pulos: Hacedlos sentar en ran-
testad sobre todos los demonios, y
chos, de cincuenta en cincuenta.
que sanasen enfermedades.
15
Y así lo hicieron, haciéndolos
2 Y los envió á que predicasen
sentar á todos.
•el reino de Dios, y que sanasen
e
M
t.
10.
16 Y tomando los cinco panes y
á los enfermos.
K·~::
g:
1.
los dos pescados, mirando al cielo
3
Y les dice:
•No toméis nada
/f¡
1
~
0
1
·9.
los bendijo, y partió, y dió
á
sus
para el camino, ni báculo, ni al- 9-f4. ·
discípulos para que pusiesen de–
forja, ni pan, ni dinero; ni tengáis .
~~·
1
6
·
!ante de las gentes.
dos vestidos cada uno.
e,.
io.
17 Y coinieron todos, y se har-
4 Y en cualquiera casa en que en-
4 - 1
1.
taron; y alzaron lo que les sobró,
trareis, quedad allí, y de allí salid.
doce cestos de pedazos.
S Y todos los que no os recibieren,
saliéndoos de aquella ciudad, aun
18 Y aconteció que estando él
el polvo sacudid de vuestros pies
solo orando, estaban con él los
en testimonio contra ellos.
discípulos ; y les preguntó, diciendo:
6 Y saliendo, rodeaban por todas •
Mt.
16.
•¿Quién dicen las gentes que soy?
las aldeas, anunciando el evange-
~~~;.
1
~:
19 Y ellos respondieron, y di–
lío, y sanando por todas partes.
2 7 -29.
jeron: Juan el Bautista; y otros,
7 Y oyó ' Herodes el tetrarca •to-
/cp.
3.
1. Elías; y otros, que algún profeta de
das las cosas que hacía; y estaba
·~\~/~:
1
-
3
·
los antiguos ha resucitado.
'-
en duda, porque decían algunos:
1
->-ts.
20
Y les dijo: ¿Y vosotros, quién
Juan ha resucitado de los muertos;
decís que soy? Entonces respon-
8 Y otros: Elías ha aparecido; y
diendo Simón P edro, dijo:
El
otros: Algún profeta de los anti-
Cristo de Dios.
guos ha resucitado.
h
M,. 8. 30.
21 hMas él, conminándolos, man-
9 Y dijo H erodes: A Juan yo
dó que á nadie dijesen esto;
degollé; ¿quién pues será éste, de
iMt.
16.
22 'Diciendo:
;Es necesario que
quien yo oigo tales cosas? Y pro-
~l;.~:
el Hijo del hombre padezca mu–
curaba verle.
.3~¡--9· ~·
chas cosas, y sea desechado de los
10
kY
vueltos los apóstoles, le
'22.'2~.
·
ancianos, y de los principes de los
contaron todas las cosas que ha-
k
~L,.
6 · 30 ·
sacerdotes, y de los escribas, y que
bían hecho.
'Y tomándolos, se
1M
t.
H.
sea muerto, y resucite al tercer dia.
retiró aparte á un lugar desierto de
~~;.
2
~:
23
Y decía á todos: msi alguno
la ciudad que se llama Bethsaida.
32-44.
quiere venir en pos de
mí,
nié-
11
Y como lo entendieron las
,;.~i~i~~~~:
guese á sí mismo, y tome su cruz
gentes, le siguieron; y él las re- ntCo.l5.31. ncada día, y sígame.
cibió, y les hablaba del reino de
24 Porque cualquiera que qui-
Dios, y sanaba á los que tenían
siere salvar su vida, la perderá; y
necesidad de cura.
cualquiera que perdiere su vida
12 Y el día había comenzado á
por causa de
mí,
éste la salvará.
declinar; y llegándose los doce, le
·~1~:~
6
·~~:
25
Porque •¿qué aprovecha al
16