,1
't'
-lS-
el espíritu de libertad. El espmtu español era incapaz de comprender la
sabiduría paternal
del
)nca, por lo que sometió a mayor dolor la vida
del Ayilú, pero no hubo un espíritu individualista que reaccionara.
En el Perú, el Ayllu de Manco Capac ejerció s'u influencia en los de
los alrededores, luchando con los que no pudo someter pacíficamente y
así se fué extendiendo hasta obtener la primicia de invadit en ondas pi'O–
gresivas el
territorio, llegando a formar un vasto imperio en la época
de la conquista española.
La obra de los conquistadores incaicos se ha comparado a la de los ·
romanos; con una sólida
organización militar fueron venciendo desde
Manco Capac, dejándoles un mando relativamente
independi-ente a
los
caracas
o jefes vencidos. A lado del
curaca
ponían un veedor o
tucuificu,
que controlapa sus actos.
En la época de la conquista estaba el imperio dividido en cuatro re–
giones: al
Antisuyu,
el
Chinchasuyu,
el
Collasuyu,
y el
Cuntisuyu.
Cada una de estas regiones se dividía en provincias conforme a su
población, dejando al curaca su antigua posesión. El régimen total de la
vida del incario estaba sometido a
la autoridad del
camayoc.
El -Ayllu
se dividía en fra<i:ciones de diez familias sujetas a un
camayoc
y
dos
grupos de cincuenta familias tenían su jefe cada uno, después grupos de
quinientos, etc., en los cuales ejercía de policía, llevaba el registro de la
población e investigaban las faltas y delitos; si éstas eran de gran im–
portancia pasaban al Consejo del Inca, de manera que la vida total del
imperio estaba contraloreada .en todos sus menores detalles.
La organización civil tenía su representación en su organización mi-.
litar; en caso de guerra era una colmena que se movía bajo la dirección
del Inca, quien tenía n9ticias por los jefes que las llevaban al Consejo
de los Cuatro Virreyes y luE:go al Inca. El ejército se organizaba por sec–
ciones de diez.
En · el orden religioso sucedía lo mjsmo. El Villac Umu, sacerdote má–
ximo del templo del Sol
y
los Vilcas formaban parte de la casta reaL La
casta sacerdotal provenía de la familia real y el Villac Umu era el
tío
1
del Inca.
1
En .el ordef1 religioso el incario respetaba el culto de las provincias
sometidas, pero les imponía el del Sol.
Traía al Cuzco la representación de todos los pueblos y al templo del
Sol o
a.
los otros oficiales las representaciones religiosas de las provincias
<;onquistadas.'
'
.
No todas ofrecían la misma capacidad de adaptación y entonces, .}a
sabiduría de este gobierno enviaba los
mitimaes,
porciones de población
ya hechas a la vida eccnómica, social, religiosa
y
polít,ica
y
las trans–
portaba a las regiones difíciles de someter, dejándolas con su organiza–
ción perfecta para que fueran centros de irradiación;
y
a su 'vez, traía
pordones . de pueblo bárbaro al . Cuzco .Para adaptarlos.
.
'