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.MéHco lleva en su escudo .el águila que, sobre un nopal, devora una
serpiente conforme ·a la leyenda que . fijaría a los peregrinos del Aztlán
.el sitio, en que edificarían su dudad. Así ocurre cqn el Tahuantinsuyu y
el Imperio de los Incas. Según una leyenda, por aparición y mandato del
padre Sol en el Lago Titicaca, Manco-Capac y su hermana y esposa Ma–
ma Occllo, viajaron ha<t:ia. el norte para civilizar poblaciones bárbaras y- se
detendrian donde una barreta de oro se enterrara, "iniciando desde allí
su' obra de conversión;' el fenómeno ocurrió en el valle donde los ríos
"Huatanay y Tulumayu" se unen para formar el
Vilca-Mayu,
río sagrado,
la actual Cuzco o Cosco o Kosko, que quiere decir según unos "ombligo
del mundo" o "centro del mundo" y según otros "amontonamiento" o
" montón de terrones".
·Otra leyenda dice, que cerca del macizo de
Vilca-Nota,
donde se
bifurca la cordill'era' de los Andes en oriental y occidental, de un sitib lla–
mado
Pacari-Tampu
o sea Venta o Posada de la Aurora, salieron t uatro
hermanos
Ayar,
con sus respectivas esposas en misión civilizadora, pero,
por diversas cucunstancias y mapiobras, fueron quedándose en el camino
convertidas en piedras, montes, cuevas, etc., tres familia's, y sólo
Ayar
Manco
llegó a1 s itio antes descripto, ti ...
ó
la barreta que se hundió fijando '
la sede de su acción. Hiram Bingham, el americano que descub.rió la ciu–
dadela de
Machu-Pichu )
situada al Noroeste de Cuzco, siguiendo la línea
de
0/lantay-Tambo
y
del Río
Uru-Bamba
(Pampa de los Urus), cree que
de este sitio salieron los
Ayar
fundadores del Cuzcc, porque encontró la
construcción de las
Cuatro-Ventanas,
el
Tampu-Toco
de donde, según · la
leyenda, salieron sus hermanos.
Y así como en toda leyenda existe una parte ,de historia
y
viceversa,
parece cierto que hubo en el Valle .del Cuzco actual, una ·lucha de predo–
min·io y eliminación entre tribus Aymarás y Quechuas, quizá a pdnctpws
del siglo XI o fines del X de la Era Cristiana; triunfaron estos últimbs
e impusieron su ley; vivían en
ayllus,
agrupación humana que más tarde
explicaré a
usted~s,
pero que, en definitiva, es un conjunto de pers,onas ·
vinculadas por el lazo consanguíneo primero, después sustittJtiva o con–
juntamente por la región habitada ' y cultivada,
u~:ta
especie de tribu u
clan; entre esas tribus o
ayllus
h
1
ubo lucha de predominio y j-erarquía, im–
poniéndose el
Ayllu Manco,
cuyo j.efe fué, así, el Civil•izador del viejo
Perú, porque él y sus sucesores, siguiendo el fatalismo de una ley histórica,
de la actitud defensiva contra otras tribus o pueblos circundantes, pasa–
ron a la ofensiva, conquistadora y reductora hacia los cuatro rumbos del
horizonte, y de la confederación del
Ayllu
se llegó a la unificación im–
perial bajo la férul a del
Ayllu Cuzqueño
de Manco-Capac. El pase del
feudalismo al centralismo real en Europa no difiere del proceso del Ta-.
huantinsuyu, sino en detalles sin importancia para la defmición del fenó–
meno. Conquistaron así- los cuzqueños a las tribus o pueblos de los
Antis,
. ~acia
el Norte
y
Noreste; a esa conquista se vincula el poema
Ollantay;
Jos
Chancas,
al Noroeste; los
Chinchas
más al Noroeste, sobre la costa;
los
Chimus, Caxamalca, Cañaris,
y siempre hacia el Nort,e, a los habi–
tantes del actual Ecuador hasta
Pasto,
en los límites de Colombia. Por
el Sud conquistaron y redujeron a los Collas, Aymarás, Ch'arcas, Huma-