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LOS CRONISTAS DEL PERU

93'

con tanto tino y acierto y dictando en cada. una de ellas sus famosas

Orde–

nanzas.

que le valieron el título de

'~Salón

Peruano", obra hecha con "tanto

esmero y discresión que subsistieron durante toda la época del coloniaje y

en ciertos aspectos hasta nuestros .dfas.

A

su paso por las serranías vió a

los indios dispersos, habitando las a]turas y J?Unas, entonces ordena las

'!re–

ducciones" y funda pueblos de inc;iígenas para que éstos vivan con orden y

gobierno, como los pueblos de San Sebasti6n, San Jerónímo y Oropesa, en

las afueras del Cusca, para citar un ejemplo, en donde hasta hoy se acata, en

mucho, las ordénanzas de Toledo.

Pero en su v1aie le e]Ilbarga una gran preocupación: es el derecho de

t::onquista y su legalidad, planteada con tanta entereza por los frailes y teó–

log9s de España, principalmente las enunciadas por el R Vitoria y exage–

rados por el P. de las Casas. · Toledo vió el hecho consumado de la conquis–

ta casteÜana y en su alma abrumaba el Sol imperial de España, ' que era ecu–

menicidad religiosa y política, que hal;>iendo triunfado en Eumpa

d~seaba

im–

plantat

y

arraigar en América. Por esta·, había que dar contestación a los

t~logos

que, desde el otro lado del mar, esperaban la respuesta, y se pro–

pone forman un- alegato ,rotundo y definitivo en pro de la justificación de

la cont{}.lista hispana en Indias, decidiéndose a emprender ' dicha obra me–

diante las

Informaciones,

\O

averiguación sobre la calidad, origen y gobierno

de los Il'lcas, pata probar que éstos habían sido tiranos, déspotas y usurpadores

de las 11erras de los aborígenes y por tanto la corona española tenía simismo

pleno derecho a la conquista de estas tierra:;;, quitándola a los usurpadores

Inc~s.

que además habían sido tiranos y habían tenido costumbres anti-na–

turales, como la sodomía y el sacrificio huma,no. Para ello optó por hacer

averiguaciones entre los viejos curacas del Imperio que aún subsistían, así

como entre +os nobles incas del Cusco

y

aún entre los viejos conquistadores.

. que vieron los últin;¡.os días d el incanato y aún existían. Estas ,Informaciones.

son once en total y , en resumen, tratan de lo sig_uiente :

La 19 hecha en

Jauja.

terminada el 20 de Noviembre de 1570, sobre el.

c;ierecho adquirido o he¡edi·tario de los caciques y curacas, si ·eran removidas.

por el Inca o no y sobre el estado de los pueblos antes de la conquista cus–

queña.

La 29, practicada en

Guam.anqa

hasta el 14 de diciembre de 1570, sob r&

el gobierno, usos y

costum~res

de los indios antes de los Incas. .

La 39, 49, 59 y 69, h echas en los taml:;los de

VUcas, Pina

y

Limatambo.

del 27 de enero al 10 de febrero. de 1571, que trata sobre · todo del gobier-·

no del Inca Tupaj lnka Yupanki y de

lo~

curacas y sinches del Imperip y sus

atribuciones.

La 79,-verificada en el

Cusco,

del 13 al 18 de marzo de 1471, con el mis–

mo o parecido interrogatorio que las anteriores _hechas en los tambos.

La 89, practicada en

Yucay,

delr 19 ·de marzo al 2 de julio de 1571, con ei

mismo interrogatorio.