160 / 324
146
J.
Imbelloni: Pachakuti IX
la transposición del historial de Pachakuti Inka Yupanki
en la casilla de Sinchi Khuski, 5° rey y primer Pachakuti,
que ha sido observada por cien otros comentaristas, pero
no ha logrado ver - y tampoco sus continuadores - que
estos juegos de repetir y transponer no son una peculiaridad
de Montesinos, como todos han pensado, sino artificios co–
munes, en mayor o menor grado, a toda la literatura histo-
. riográfica del Perú antiguo, y obedecen en gran parte a causas
muy hondas. En cuanto a la ausencia del Pachakuti en la
lista de las
Memorias
que se refiere estrictamente al Inkario,
Markham está en lo cierto, en el sentido de la indagación
que venimos realizando en este párrafo y que claramente se
expresa en su intitulación, esto es, de un soberano caracte–
rizado por tal nombre que figure en la lista del Cuzco pro–
piamente dicha, de acuerdo al gusto y las intenciones de los
Garcilasos y los Betanzos.
Esto no quita que si - en cambio - hablamos del
Pa–
chakuti
en el sentido que ha ido surgiendo página tras pá–
gina, en esta obra, la 'falta' atribuída a Montesinos es un
contrasentido, pues en su cap. XXIII
(in pn:ncipio)
está
claramente consignado que el reinado de Wiraqocha señala
la terminación de uno de los Soles americanos, punto cro–
nológico que es propio de un
Pachakuti
(cesura que en la
lista de Bias Valera es expresada de modo explícito por la
designación del sucesor de Wiraqocha, Ttitu (Túpaq) Yu–
panki, calificado como iniciador del nuevo ciclo y apodado
Pachakuti IX).
16. - Transposiciones del lnkario: su doble categoría.
El tema de las transposiciones o transferencias de ele–
mentos historiográficos de uno a otro personaje del Inkario -
tocado de paso en la parte final del párrafo que antecede -
reviste tal importancia, que se impone una mirada menos