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·en un pe-queño núcleo de inteligencias que
absorbí~
la vida
Jfntera d·el país; España, por_el ·contrario, era un hormigue-ro
. d·e individuos que se entrechocaban
~n
luchas perpetuas.
_ Es en =esta_España hirviente de vida donde
~a
nacido el
tipo de hombre que reunía en si, llevados .al extremo, las
cualidades y los defe.ctos de su raza: el conquistador. Arras-
'
..
trado por la .pasi-ón más que por una voluntad reflexiva;
'
.
obedi·ente al ·espíritu de camaradería más bien que al
s~en-
timi-ento de justi·cia;
~istico
y sensual, a.mbici<>so y astuto,
val~eroso
y te·naz,
·es
·el .más perfe1cto y T·epr.esentante de es-e
casticismo que ·c·oncentra el valor y la v-irtud de. toda Cas-:
till~
(
1) .
Mira la vida ·como una lotería, no calcula nada
y
arri·esga su ·existencia .en una tirada de dados; la conquista
le atrae p
s, tan desme–
Y seguros d'e su desti–
no, "·enamorados de gloria", sem·ejantes
a
ese castellano
·cuya historia nos ha ¡contado Enrique Larreta (2) .. Quien
·conozca los desfiladeros de la cordillera puede comprender
·~1
estado
dte
:espíritu de los que se atrevi·eron a cruzarla en
núm·ero de m·enos · de 200, en
pl~eno
país enemigo
y
d·es-
conocido.
·.
Es
équivocado. ver ·en los conquistador·es simples ban–
didos sedi-entos de oro y de placer. Indudablemente hubo en
las huestes de Pizarro muchas gentes del hampa, y bastaría
\
a probarlo el siguiente detalle; después de la captura del
( 1) Altamira, "Psicologí-a del pueblo español". Oviedo,
1902.~Una
muno, "En tomo ·al casticismo", Salamanca, 1902.-Navarro
y
Ledesma, "Vi–
da del ingenioso hidalgo Miguel de Cervantes Saavedra", Madrid, 1905.–
Blanco Fombona, "El conquistador del siglo XVI", Madrid, 1922.
(2) En su célebre novela "La gloria de
Don
Ramiro".
-386-.