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I
S
B
A
u
D
· I
N
hombres (1) ,
y
en ·estos a·colchados con algodón, destina–
dos a proteger .el ·CUerpo
COll
tra las flechas (2) .
Todas estas armas, ofensivas
y
defensivas, se hallaban
en gran número en los
depósitos
públicos
que Beau–
champ llama "arse•nales" (3) .
· El inca nevaba un gran escudo cuadrado, de mad·era o
de cuero, con una franja de tela, que tenía a la espalda una
correa. de cuero por la cual pasaba el brazo izqui-erdo;
sos–
tenía con la mano def'e·cha una maza que ter-minaba en
una ·estrella de· bronce de seis.u .ocho puntas (
4).
Este ejércitu poderoso, así organizado
y
equipaQ.o, some–
tido a una disciplina rígidá, era un temibl,e instrumento de
co.nquista,
ero los soberanos no se .servían de él más que
cuando allaban los otro .
ios ·ecinos
y
matado
· ranos del Cuzco
,
~~~~~~"'!P,
mostrándoles la
-
'""':.,.,"l:)·"r·¡
,
c·e d demostración de
sus riquez
ofre-c·endo regalos a los .
j-ef.es.· de las tribus
. (5) .
.Si la diplomacia fracasaba, los
soldad~
entraban en
·esc·ena, pero siempre
y
'en
todo instante los adversarios
podían capitular; si no habíatl cometido traición, estaban
segur·os de no sufrir ninguna rep!-'·esalia. Jamás el in:ca se
entr·egaba a actos de crueldad .inútHes. Indudablemente no
obraba así por espíritu humanitario; era símplemente un
interés bien :entendido; no ignoraba .que .uncía más sólida–
mente a los pueblos a
su
trono mediante un tratami-ento
(1) Molina, "Relación de la conquista ...... p. 143.- Ma.rcos de Niza,
11
Re,Zation".
Trad. f:r.anc., p .
290.
·
(2) Tal
•vez
con p1aca.s de cobre,
a veces.
Montesinos, "Memorias",
cap. 10.
.
.
(3)
"Histoire de la conquete et des revolutions du Pér ou",
t.
I,
p.
37.
(4) Markham,
uThe Incas of Peru",
oap . 9.
(5)
Es
lo que Garcilaso llama, con alguna exageración:
ganar.s~
va–
sallos por amor
y
no por la fuerza. (' ..Comentarios", lib. 3, cap. 15).
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