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o
I
S
8
A
J)
I
tema com·unitario presenta inconvenientes, pero todos ad–
miten que seria imprudente suprimirlo lana
y
simplemen–
te
y
que
108
virreyes
de
Espáfía ·estuvieron bien inspirados
al
:mantenerlo
(1) . .
Uno se siente tentado
a
repetir, a pro–
pósito del Perú,_lo que decía Suínner Maine de _las comuni--
. dades que -existen en l:;t:S Indias inglesas: "Las conquistas
y
las revoluciones ·parecen haber pasado sobre ellas sin per–
turbarlas ni desplazarlas,
y
los
sistemaS d-e -gobierno más
bienhechores para la Ind-ia han sido siempre los que las
han tomado .c;o;mo base de su admintstr-ació'n"
(2).
Los
in–
cas lo han logrado de otro modo, pero ·la· cuestión no se
pl~nteaba
de la misma manera en su 'tiempo; los inconve–
nientes de la propiedad colectiva, fomento de la pereza, ago–
tamiento del suelo, no existían ·en una época en que el tra–
bajo era
ligatorio
y
es -ba
~
t_ri tam nte . vigilado; estos
males so
e
a
d
a
d.
Reco oz
d·e los an ig
antes de ·e los;
es, por e eontrario, haber man–
t~nido
en el marco de un imperio
~as
instituciones estable–
cid-as en
socieda~es
restringidas .
Pero hay algo más que esa supervivencia en ·el siste-ma
peruano.
•
1
(1) Garcfa Calderón,
"Le Pérou contemporcdn",
Parfs,
1907,
p.
329.
(2) Summer Maine,
"L'ancten drott
11 •
Trad.
franc.,
París, 1874,
p.
245.
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