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das nacione3, indicios claros y permanentes de la altura de la civi·

lizaci6n a que habian llegado".

(1)

Las fras es del gran historiador son muy valiosas; y si, como

saj6n, hay en el mucha vehemencia y tal vez alguna acritud al ca–

lificar la intolera.ncia religiosa reina.nte entonces en Europa, no se

puede desconocer que en su3 aseveraciones hay mucha verdad, y

sus juicios relativos a las civilizacioneil de America son la mas jus–

y certera calificaci6n. En comecuenci•a, el nivel cultural del an–

tiguo Peru permite inducir la existencia de una literatura de avan–

za.do

desarrollo.

Baudin (2) escribe: " ... los peruanos escapan a toda clasifi–

caci6n: tienen, a la vez, procedimientos tecnicos primitivos y otros

muy perfeccionados; tratan a los hombres como a ganado, pero sa–

ben r ecompensar el merito; hacen tambores con la piel de los re–

beldes, pero dejan en funciones a los jefes enemi gos vencidos, des–

pues de haberlos colma<lo de presentes; ignoran la rueda., pero re–

presentan piezas de teatro; no saben escribir, pero levantan im–

peGables

es~adi'.stica1

... . La. admirable historia de los Incas no pue–

de ya tener continuaci6n ".

Cronau

(3)

dice tambien: "si consideramos en conjunto los

trabaj0.; intelectuales r ealizr.clos por los pueblos del Tahuantinsu–

yo, t enemos que confesar que habian llegado a un grado de cultui'a

bastante

desarrolla.do

, cultura tanto mas

~devada,

cuanto que

fue

el primer despertar de aquella r:aza. Con frecuencia han dicho cier–

to<>

iajeros, tratando de enaltecer orgullosamente a si misma, que

la raza americana carece de aptitudes salientes, y que aun perma–

nece sumida en una mediana civilizaci6n. Al decir esto han olvidado

la alta cultura del antiguo P eru, y que esta no ha sido, como las muy

alabadas de Occidente, cultivada en un terreno preparado por los

antiguos egipcios, b:abilonios, griegos y romanos, sino que ha cre–

cido, por el contrario, cual flor maravillosa,en un rinc6n de la

tierra, separado del resto del mundo por las

montafi.as

mas colos a–

les y agr est es, por los bo·sques mas impenetra-hles

por el mayor de

t odos lo mares".

'' Seguramente, la civ.ilizaci6n d_el pueblo americano, tal

con–

forme la. encontraron los espafi.oles en las altas mesetas de las Cor–

dilleras, er·a mucho mas completa que aquella con que la sustituye–

ron lo conquistadores, pues con la Hamada civilizaci6n introduci–

da por estos, no se ha conseguido otra cosa que destruir la que ha–

bi'.an alcanzado los indios' '.

(1) Ob.

cit.

(2)

El I mperio socialista de los Incas. Versi6n castellana de Emilia Ro–

mer o. Universidad Mayor de San Marcos.

(3) Ob. cit.