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CATÁLOGO ll AZONADO DE f,A
EC
l<ÍN L!NGÜÍ TI 'A
H e aquí u punto tle partida : « Dotado
lo
diale ·to · del
lVfaya-Quicllé de un si tema de conjugación ba tante compli–
cado (es por el contrario muy
imple), y aun rico (e por el con–
trario muy pobre en el sentido poli intético) en realidad, falta
el verbo á la conjugación, ó má bien, la conj ngaeione
e for–
man e encialmE»nte por la adqui ición de una raíz cualquiera
(ca i
iempre pronominal)y de cierto pronombre , y á vece ele
cierto
igno
ele tiempo » (que también
on pronominale ).
Muy lejo · e tá ésto ele la tenden ia hacia la flexión.
Es intere ante lo que el autor dice r pecto de la
fuucion
del pronombre, que comprueba lo que al respecto hemo
. o te–
uiclo en otro artículo
(V.
Beltrán), de que el Maya e un idioma
pronominal, y que basta podría decir e, que toda
la parte
esenciales ele la oración de n gTamática
e reducen al verbo
y
al pronombre, formándo e co11 é te el verbo en ·u modo , tiem–
po y per ona .
« F uera de la
rafoe verbale -
dice
haren ·ey -
el Qui–
·hé no hace entrar sino do elementos ele conjugación á aber
la prepo icione (que on poqní ima.) y lo pronombr
. » De
ma,nera que no quedan en realidad sino la
raíces de los nom–
bre
que se convierten en verbos por medio de lo. pronombre .
En seguida agTega : « El Maya posee un tripl e paradigma
pronominal afectado al verbo. Por regla general
l pronombr
sujeto del verbo en Quiché, como en la mayor parte de lo dia–
lecto. congéneres, debe er po pue to al verbo. E l
el
l Maya
¡tparl'ce má
libre en
n movimiento
(como que
s ind pen–
diente
y
de ahí la yuxtapo ición). Se ob. erva en él qne cada
forma de la declinación pronominal deja de caracterizar mm
voz verbal particular pudiendo juntar ·e el ca o oblicuo
á
un
tiemvo intran itivo.
En el Maya la duplicación pronominal repre en ta un
par
c·l
e encial en
1
verbo
y
,irve para marcar el ti mpo.
De pué ele
. ta rlemo tracione
qu hablan por
·í, 1
autor