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APOLOGIA RACIONAL
exemplares de esta obra, que teniendo yo
algun cuidado de aquella librería, dexando
una buena provision en casa, vendl el año
de sesenta, 6 sesenta
y
uno seis, ocho, o
diez exemplares de ella al famoso Librero
'de Madrid Bartholome Ulloa, que me los
pidio con mucho empeño; porque, empe–
zandose ya por aquel tiempo a mover la
Causa de Palafox ,
esta obra,
me dixo el
mismo,
va a ser de moda, y muz· estimable.
« No falto en Roma, quien tuviese a
tiempo noticia de este curioso parrafillo, y.
se lo aviso a un amigo suyo en esta ciudad,
suplicandolr,
y
rogandole encarecidamente,
que hiciese las mas vivas diligencias,
y
todos los esfuerzos posibles para hacerle
con un exemplar de la obra de Marin. Con
este aviso se cayo en cuenta del orden, que
vino havra dos años
y
medio a estos Comi–
sarios, sobre el libro de fario contra la
Vz'da z'nterior
de Palafox, y se conocio cla–
ramente, que el asunto, e intento del, no
havia sido otro, que averiguar, si entre los
Jesuitas Espafioles desterrados en Italia, se
hallaba algun exemplar de dicha obra ¡
y
es
bien facil de entendff, quanto sentiria en
esta ocasion el P. Idiaquez el haver dado
orden al P. Fran.
00
Sierra, de que quemase
el exemplar, que tenia. Pero al fin ha havido
la fortuna, de que
~e
encontrase otro exem–
plar en poder del P .• Juaquin Iturri. Me
consta tambien, que se encentro un segundo
exemplar entre los P adres Aragoneses,
y
los dos se embiaron a Roma con diligencia,
y
seguridad, y fueron puestos en ruanos de
dos Cardenales [ Albani
y
Borromei?J, que
havian de asistir a la Congregacion [lla–
mada
P reparatoria].
Llego el dia 19 [de
Septiembre de
177
5]
en que esta se celebro,
y
en ella hablo este, o el otro del libro de
Mathias Marin contra la
Vida interior
del
V. Siervo de Dios, y se dixo o por escrito,
o de palabra el parrafito de la respuesta del
Abogado, y protestaron de nuevo, qt.:e se
havian hecho todas las posibles diligencias
por encontrarle,
y
que no se hallaba en
parte alguna
;~y
aun parece, que_el Promo–
tor; de la Fe l\lonseñor Sampieri aseguro
por su parte lo mi mo. Este era el punto,
y
momento oportunissimo para confundir–
los, desmentirlos,_ y avergonzarlos a todo_s.
Saca del pecho uno de los dos Cardenales
un exemplar de la obra de Mathias Mario,
y
encarandose con el Promotor de la Fe:
Ai tiene
V.,
le dice,
ttn exemplar de la obra
del D.r Mat/zias Ma1·úz contra la Vz'da úi–
tcrzor del Siervo de Dios,-
y
se lo entrego
con las precaucionés,
y
formalidades con–
venientes:
Y por si acaso,
tomo la palabra
el otro
Em.mo,
se desaparece esse exemplar,
aqtti tzºe1ze
V.
otro segundo:
y
sacandolo del
pecho se le entrego del mismo modo al
Promotor de la Fe. Se ha dado jamas una
bofetada mas oportuna, con mexor aire,
y
en un congreso mas grave, mas numeroso,
y mas authorizado... .?» (págs. 431-439).
Esto está escrito
á
_28 de Septiembre
de 1775; es decir, muy pocos días después
de la famosa Congregación.
373r.-Apologia Racional, la Verdad
defendidaJ contra la Inocencia vindica–
da, Respvesta contra Respvesta, Irnpvg–
nacion de la Irnpvgnacion. Qve intenta
el Reveren.dissirno Padre Fray Juan de
la Anunciacion, General del Carmen
Descalc,;o. Contra las Notas de 'vn Ano–
nyrno.
A
la Vida Interior del Ilvstrissi–
rno Señor Don Jvan de Palafox. Escrita
Por el Doctor Don Gregorio Ponce de
Leon. En Zaragoza. Por la Viuda de
Diego deOrrner. Con Privilegio.-En4.º,
de
2
r
5
ps.,
s. r
h.
p.
n.
EL P. TOMÁS
DE
SALAS
y
VALDÉS.
« Apologiam quamdam scripsit, et edidit
quamvis suppresso nomine, Matriti in 4.º
anno 1695. Verum zelo Superiorum Socie–
tatis vitandre ergo cujuscumque offensionis
cautum est, ne divulgaretur», se dice de él
en el
Sttpp!em. Script. Prov. Tolet.
S.
J.
(pág. 85), copiado ya por Backer (m, 491)
y Sommervogel (vll,-452); y aun más claro
en el de Alcázar: <<Sub nomine D. Gregorij
Ponce de Leon edidit:
Apologiam ratzoua–
lem, et veniatem defe11sam p1·0 animadver–
szo11ibus A11011ymi ad v itam i11ten or. m
Illust. D . Joa11nis de P alafox.
C~saraugust~