ESTUDIOS INDIGENAS.
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respecto
a
la nacionalidad y origenes de cada uno de
aque llos, cuando la misma Academia que se limit6
a
enumerar unos pocos ha cometido faltas imperdona–
bles. Abrimos el diccionario de esta docta corpora.
cion,
y
leemos: GUAYAQUIL:
cidjeti'l'O qite se aplica
a
lo qiw es de la JJrovincici de Gitctyaquil, en el Peri(,;
y
ctsi se clice : caccw de Giutyctqiiil : y aifoi se sustantiva
en esta cwepcion.
Pasando sobre el error geogra:fico respecto de la
nacionalidad de Guayaquil, rechazamos por completo
el emplo que quiere darse al vocablo indigena. Si la
Academia hubiera dicho,
cacao guaya,qiiilm1o,
estaria en
6rden; pero de ninguna manera lo esta
acljetivizando
un nombre geogra:fico. Ouando se dice,
ccwao Oara–
ccis, cafe JJ!loca,, ct1naryo Angosturci,
se comete una elip–
se, de la misma manera que cuando decimos,
vino
Jerez, ctrmcis Toledo, tiirron Aliccinte,
para significar
cacao de Caracas, cafe de Moca, amargo de Angostu–
ra, vino de Jerez, etc., etc. Si se acepta que Guayaquil
sea adjetivo, en este casd tenclriamos que aceptar igual–
mente
a
Toledo, Jerez, Malaga, Caracas, y a toda
ciudad que haya dado
SU
nombre
a
alguna de
SUS
principales producciones naturales 6 industriales. Afor–
tunadamente el senor Campano en su dicciorrario mo–
clerno ha suprimido la forzada acepcion impuesta por
ia Academia,
y
que todos los diccionarios hau estado
copianclo hace muchos ailos. (14)
(14 ) Ninguna oportunidad mas propicia para la formaciOll
cle Un diccionario COmpleto de la lengua, que esta, en que
la Academia tiene en America sus socios correspondientes .
-Nosotros creemos que el sistema puesto en practica para
ensanchar los trabajos de la celebre Corporacion no produ–
cira resultados inmediatos. Nos: parece que seria mui pro–
vechoso el que la Academia abriera un certamen americano, .
sometiend0 al estudio de los escritores y profesores de la Ame–
-s:foa
espafiola una serie de cuestiones dadas por ella conexio-