828
D. JOAQUIN DE LA PEZUELA.
Los dos estados, que la costeaban, garantizaban la
independencia del que se {{>rmára en el Perú, cuan–
do la capital estuviese lib're.
Para allanar el camino á las huestes libertado–
ras' destruir en todo
6
en parte la escuadra realista,.
y
hacer presas de importanci3:, se habia dirigido· .
Lord Cochrane á las costas del Perú , .el 16 de Ene–
ro de 1819, con la
O'Higgins,
el
San Martín,
la
Lautaro
y
el
Cliacabuco.
Esperaba sacar las fraga–
tas
Esmeralda
y
Venganza
,
ambas de cuarenta.
cañones y ancladas en las aguas del Callao , va–
liéndose de la disipacion propia del carnaval, y en–
gañando
á
los realistas con tomar .el pabellon nor–
te-americano en la
O'Higgi·ns
y
la
Lautaro,
para.
que le dejáran acercarse, creyendo ser dos buques
de los_ Estados-Unidos , que debian llegar de un
momento
á
otro. Una densa niebla, que tuvq sepa–
rada durante cuatro dias á la Lautaro del resto de
la escuadra, le impidió entrar en el puerto hasta
el 28 de Febrero;
Y.
.du·rand~
aún la niebla, oyó
gran fuego de artillería, que le hizo creer estaba
empeñado el combate. Era el saludo al Virey, quien
babia bajado de Lima á hacer una revista de las
baterías de la fortaleza
y
buques, noticioso de que
el enemigo podria atacarlos, pero no recelando de
ninguna manera tenerle ya
á
la vista. Léjos de eso,
al aclarar un poco la niebla quiso dirigirse
á
la
O'Hi!Jg'ins,
tomándola por un buque de España,
y
,hupiera caido prisionero al acercarse, si no le disua-