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EL MARQUÉS DE OSORNO.
biéndose añadido, entre otras obras, un fortin . en
el puerto de Pisco, y proyectos considerables sobre
la recobrada ciudad de O )rno, que presentaba un
especial interes, por facilitar 1as comunicaciones
militares entre Chiloe y Valdivia. En la reorgani–
zacion de las tropas creó el Marqués un nuevo cuer–
po de dragones, cuya formacion fué desaprobada
por la córte.
El Virey prestaba una señalada atencion
á
l po–
licía de la capital: dió apreciables bandos sobr l
principales ramos,
y
mostró una singular solicitud
por su fiel observancia . Habiendo salido
á
rond r
de noche, y siendo aprehendido p·or los vi
0
·ilantes,
fué llevado al cuartel como un vagabundo ordina–
rio, y se dió por satisfecho de tan severa igi–
lancia.
Los mal entretenidos eran la peste de la ciudad
de los Reyes. De entre más de treinta mil persona ,.
pertenecientes
á
las clases abatidás, apénas había
trece mil, que tuvieran una profesion útil ; el resto
sólo podia subsistir de ocupaciones precaria , li–
mosnas
ó
industrias perniciosas. Aunque en mue
menor número, eran harto más peligrosos lo v -
go , que de la península venían embarcados, sin
licencia, ni destino, con el nombre de
polizones.
La esperanza de improvi ar una ran fortuna, 1
importancia, que aquí se arro
0
aban por
6lq
tener
la cara blanca,
el
deseo de escapará quintas, levas
ú
otras pensiones y el emor de
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1 .
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