Previous Page  316 / 544 Next Page
Information
Show Menu
Previous Page 316 / 544 Next Page
Page Background

300

men<;aron de seguir a su G enera l, que auia toma–

do la delant era, los quales como yuan a la ligeri:l

yuan redoblando las jornadas por alcan<;ar a los

leales. Mas como Diego Centeno y Jos suyos auian

ll euado gran ventaja en andar, que auian camina–

do mucho· en cauallos descansados, no los pudie–

ron a lca n<;ar por mucho que anduvieron, los qua- ·

les entraron mas de cinquenta leguas tras ellos

por el gran despoblado y no los pudieron alcan–

<;ar. Por es to algunos soldados de Alonso de Toro

se boluieron del camino y se vinieron a la villa,

porque se les auia acabado la poca comida que

auian lleuado, y porque iambien por donde passa–

ron no auia agua s ino unos xag-ueis que los de Die-

. go Centeno a uía n empon<;oñado con tri g o y otras

cosas que auian hecha do dentro. Mira ndo es tos

ynconuenientes con otros que se podría n r ec r escer

en lleuar a que lla gente por aquel despobla do mu e r–

ta de frío y h ambre y fatigada de sed, determino

d e da r la buelta a la villa, y assi lo hizo, que se

b oluio a ella con toda su gente , bien cansa do a un–

qu e no vengado. Ass i como llego, dende a dos

días, viendo que a llí no auia qu e hazer ni con

quien comp etir, hizo luego gran ll amamiento de

todos los caciques ·y principales y ndios qu e a ui a

en toda la comarca de a quella jurisdicion, qu e vi–

ni essen prestamente con mu chos bastimentos d e

diuersas cosas, so pena que los m a nd aria quemar

a tod os biuos. Los caciques y principales yndios,

amedr e ntados del ma ndo, v inieron y truxieron mu–

chos carneros de los de aque lla ti erra, ma hiz, pa–

pas, qu e son turmas de tierra, y chuño y otros mu-