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un mandamiento a Niculas de Ribera, el viejo, alcal–
de, para que fuese y traxiese delante de su presen–
c;ia al Visorrey
» ( I ) .
Una vez preso Blasco Núñez Vela, Pedro Gutié·
rrez siguió el partido de los Oidores y de Gonzalo
Pizarra y sirvió de secretario al capitán
Lor~
i_e
Aldana, conquistador de relevantes méritos, pero
de ninguna consecuencia política y atento siempre
á su negocio. Adicto á Francisco Pizarro, de quien
recibió altos cargos
y
señaladas mercedes, siguió
después al Visorrey Núñez Vela,
á
quien abandonó
cuando Gonzalo Pizarro triunfaba, y fué teniente de
éste en la ciudad de Lima; luego dejó el bando pi–
zarrista
y
ayudó al presidente La Gasea, diciendo
que había aceptado aquel destino por miedo de que
lo mataran si lo rehus.aba (z) . Militando siempre con
los vencedores, logró buenos repartimientos de
iil–
dios en la provincia de Jauja
y
en otras partes.
El cargo de secretario que dice haber tenido Pe–
dro Gutiérrez no debió de ser tan importante como
(I)
Guerra de Quito,-
cap. LXI\.
(2) Con su hábil política supo
~ngañar
al mismo
D.
Pedro de La Gasea,
quien escribía: •Haber sido Lorenzo .de Aldana muy de co1azón servidor
de
S. M.
y
haber amparado, teniendo el ofieio de teniente,
á
todo los buenos,
y
excusado que no matasen muchos dellos, que mataran los ministros de
Gonzalo Piiarro,
y
haber deseado poner esta ciudad
deb~jo
de la voz
de S. M.
es cosA muy notoria• •
.(Colección de áoc111nmtos inéditos para la Historia de
E~jaiía;
tomCJ T.,
pá,.
33.)