CAPITULO XXIV
.DEL
G~AN
ALBOROTO QUE SE CAUSO EN LA CIB::>AD DE
LIMA
CO:.'i
LA ENIDA DE LOS DOS CAPITANES ALONSO
DE. CÁCERES Y GERÓNIMO DE LA SERNA, QUE VINIERON
DE LA CIBDAD DE AREQUIPA, POR LA MAR, EN UN BUEN
NAUIO Y UNA CHALUPA
Assi como el capitan Geronimo de la Serna sa–
lio del campo tiránico, como era hombre ex:perto
no se dorm io en el camino, porque el y los que
yuan con el se dieron tal maña y tanta priessa en
-caminar é\quella noche, que fueron por caminos y
atajos de pocos sabidos, en donde passaron gran–
des trabajos q e hambre y trio por vnos desp0bla–
<los que atrauesaron, y sin les acaecer cosa algu–
na llegaron saluos a la cibdad de Arequipa, y sin
/
yr a otra parte se fueron derechamente a las casas
del marques Don Francisco Pi<;arro, en donde el
th~niente
Alonso de Caceres possaua. Quando el
theni ente _vido a Geronimo de la Serna,· como se
·conoscian de atras y se tenian por amigos por auer
sido
pany~gu~dos d~ -~~~a
de Cq.stro, le salio a
rescebir c(;m los bra<;os abiertos, y dandole el pa–
rabien de su venida trataron en cosas generales y
particulares con
cari~ias
de buen amistad. Venida
(