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los quales todos fueron señalados con unas
cruz~s
rojas en los pechos, y hordenados caualleros co–
noscidos; a los,.. quales todos dio dineros y rnu–
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matalotaje y nauios para proseg·uir su viaje,
y assj. luego se mostraron briosos y alentados,
mostrandose cauallerosos. Los que se mostraron
mas con altiuez y entonados fueron Pedro Mingo,
juan Martin, con otros, sin acordar e de la agui–
jada, ni de los bueyes y corderitos, ni del brinco ni
respin;o que dauan al tiempo que tirauan el agui-
jada, sino que andauan muy lomienhiestos los do–
min;os y fiestas, con' muchas plumas en las gorras
.coloradas, y el Padre reverendo en medio dellos.
Y al :fin se embarcaron todos en Seuilla, lleuando
·por delante a sus mugeres, y muchos recaudos
que les conuenia lleuar, de much9 vizcocho, vino
y jamones, con otras muchas cosas de regalo, que
todo fue a costa de Su Magestad, y con esto hizie–
ron vela
l~asta
que lle;aron á Cumaná. Los pri–
meros que
.~ altaron
en tierra fueron Pedro Pas–
qual, Alonso García, Pedro Cejudo, Juan Manoj_o
y
Hernan Bec;os, con oLros, y luego salieron Maria
Menga~
Theresa Diaz, Sancha García, Juana
Luene;a
y
Maria Lopez, con otras. Assi como lle–
garon, el Capitan Gonc;alo de Ocampo y los que
c.onel estauan
l~s
rescibieron muy bien, aunque
.se burlauan dellos y de su manera de vestir, y
.como venian a poblar ciegamente entre gente
bruta, comedora de carne humana. A los quales
dixo:
Seizores primos, no penseis que aueis de
acertar en cosa alguna por via de hidalguía
y
ca.ualleria,, sino a muy buenas lan{:adas
y
porra..,