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HI TOlllA
ma, ya tal
ó
tal práctica, ora la de truccion de todo gobierno e·c1e iá tico ,
ora la ab oluta independencia de lo fieles el solo recur o
á
la in pira–
ciones del E piritu anto. El ardor se ha ia por todas partes uperior
. á
los temores. Apesar de la activa inqui icion de Laud, se reunían toda
u rt de e tario en los subterráneos de Ja ciudade , en la quinta
ó
en medio de lo bo que . La tri teza del lugar, el p ligro y la diücultacl
de Ja reunion' lodo ·contribuía
á
enardecer la imaginacion de lo predica–
dores
y
de lo oyentes. Pa aban juntos largas hora , mucha noches en–
teras orando, cantando, invocando al eñor y maldiciendo
á
us ene–
migo.
Po o importaba
á
Ja eguridad y al crédito de e ta a ociacione fa–
náticas la ligereza de u doctrina
y
el corto número de su l artidario :
las protegia el re enlimiento general del pal . Pronto, in r parar en
. reencias ni de ignio , dispensó el favor públi o tal confianza
á
lo no–
conformista , que a no titubearon en di tinguir e por su hábito y mo–
dale , profe ando a
i
abiertamente sus opinione . V stido de negro, casi
rapada
la
abeza,
y
cubierta con un ombrero alto de ancha ala , fue–
ron objeto de la admira ion de la muchedumbre que.les dió el nombre de
santo . Aumentóse su rédito hasta tal punto, que
á
pe ar de la opresion ,
e declaraban en u favor lo mas hipócrita . Lo omer iant s arruina–
dos, los jornaleros faltos de trabajo, los hombres empobrecidos por sus
prodigalidade ó por deuda , todo aquel que tenia nece idad de olver
á
ganar la estimacion pública, tomaba el aire el lenguage de los autos,
y
pronto obtenia proteccion de una credulidad apa ionada. Meno general
tumultuo a la agita ion n punto
á
politica, no dejaba por esto de ir lo–
mando .incremento. En el no de la clase inferiores, ya por afe l d
nuevas necesidades,
ó
por plritu de nuevas creencia , mpezaban
á
circular idea de una igualdad ha ta
~nlonces
de
conoc~ida
.
En una
es~
ra mas elevada, alguno e piritus fuertes alti os dele -
taban la córte, despreciaban la influencia de la antigua le re ' e n–
tregaban con ardor á ia libertad d 1pensamiento, ideando n la soledad
de su lecturas
~n
·sus e retas conferen ia in tilur.iones mas sencillas
eficaces. gitados otros de preten ione m no puras, de conociendo
toda
~
, inico por co lumbre, y ntrometido por antojo
ó
por ca talidad
ntre lo de contentos, a piraban
á
un sacudimi nlo que abriese algun
re piradero
á
uambi ion,
ó
cuando menos lo eman ipara d Lodo ugo.
hl fan ti mo la li encía, la eruad la hipo re la, 1r p lo el de -
precio ltácia las antigua instituciones,
la nece idades
los deseos