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OBRE LA llEVOLUCIO ' DE INGLATERRA.
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g'icamenle, pero sin involucrarlos con las cuestiones generales
y
apasio–
naqas. Por órden suya cruzaba el almirante Blake el Mediterráneo con
una podero a escuadra
á
fin
de
acudir
á
todos lo punto donde la Ingla–
terra tuviera que hacer alguna reclamacíon. Esta escuadra se presentó
ucesivamente en Liorna, Argel, Tunez
y
Trípoli , arregló de un modo
brillante, pero in añadir nuevos moth os de encono,
y
no se retiró sin
haber alcanzado completa satisfaccion por los daños causados.
o e bacian en vano tantos esfuerzo ni se conseguían tantas victo–
ria ; mas no puede decirse que por ellas alcanzaba el vencedor su ver–
uadero
y
último objeto. Aquel gobierno tan activo sin temeridad; tan
die tro en alhagar las pasiones nacionales sin esclavizarlas ; aquel go–
bierno que en lo esterior sabia engrandecer la nacion sin comprometerla,
y
en lo interior mantenía el órden con los soldados de la revolucion ; aquel
Cromwell lan temido, obedecido
y
admirado no llegaban
á
er,har profun–
das raices. La Inglalerra se sometia
á
su talento
y
á
su fuerza; pero no
a eptaba su dominacion. Con umado en el arte de rearse partidarios,
apenas dejaba pa ar un·dia sin atraer
á
u lado algun personaje de los
antiguos partidos, obligándole
á
servir activamente, ópor lo menos
á
que
dejase de figurar entre su enemigos. Mas á pesar de e o los partido ,
realista , r publicanos, presbiteriano , seguiau siempre subsistiendo, es–
taban comprimidos pero respiraban
y
no acababan de renunciar
á
sus
e peranza , ni
á
sus medios de accion.
Durante lo 'inco año del imperio de Crom"' ell ocurrieron quince
con piracione
é
insurrecciones realistas , republicanas ó coaligada , sin
contar una multitud de tentativas oscuras que causaron grave alarma al
gobierno
y
pu ieron en peligro la vida del protector. Riprimlalas este
enérgicamente sin crueldad
y
sin compasion , aproximándose segun lo
exigian las circunstancia al uno ó al otro de estos dos e.slremos, em–
pleando imultáneamente las leyes
y
la arbitrariedad, el Jurado
y
los tri–
bunales e cepcionalos, una policía incansable
y
un ejército lleno de adhe-
ion, las prisiones secretas
y
las ejecuciones ruidosas, el destierro, el
encarcelamiento , la venta de los in urreccionados en Ja colonias como
esclavos,
y
Onalmente todo cuanto puede inventarse para inutilizar ,ó
aterrará los enemigos.
Jinguna conspiracion tuvo buen resultado : Crom' ell supo desbara–
tar todas las maquinaciones sofo ar todo los movimiento armados.
El pais no tomaba parte en sas sublevacione
y
permanecía en reposo;
ma no reía ni en la 1gilimidad ni en la duracion de aquel poder iem-