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DE LA REVOL CIO

DE

INGLATERRA.

,....

3

anunciado

á

ál'ios en Ja . ecreta corre pondencia, que de de mucho tiem–

po atrás mantenia con él, diciéndole que le eria fá il escapar uand

quisiese de su escolta, burlando al travé del bo que·, cu o senderos co–

nocía muy bien el rey, la ma encamizada persecucion.

Cárlos en efecto desde Farnham

á

Bagshot se quejaba in cesar de u

caballo anunciando que lo querría cambiar. Pero·apena U¿gó

á

Bagsbot,

supo que la vlspera, el caballo con que cqntaba habia en el establ

recibido un goipe tan fuerte en el pié que no estaba en estado de servil'.

Lord ·Newburgh, desconsolado, le ofreció otros ·caballos, «muy bueno ,

segun decía,

y

que ba taban para acarle del paso.» Pero aun cuancl

hubiese sido con él mas veloz, la empre a era peligrosa, porque lo sol–

dados de la e coita estaban siempre muy cerca del rey y on pi tola n

mano. Cárlos renunció sin trabajo

á

arro trar tal peligro;

por

la tard

al llegar

á

Windsor, contento de entrar en uno de su palacio , de ocu–

par su aco tumbrado apo ento,

r

encontrarlo todo preparado para reci–

birle, poco mas ómeno como cuando iba con su qórle

pa ar n aquel

hermoso Jugar lo días de fie ta , lejos de sentir e atormentado por i–

niestros presagio , casi babia olvidado que estaba prisionero.

En el mi mo día yca i al mismo in tante la cámara baja otaba que se–

ria procesado, y se nombraba una comision para preparar la acusacion.

1esar de los pocos miembros presentes, muchas voce $e le antaron con–

tra aquella .medida: los uno pedian que se oncretasen

á

deponerla con–

mo a se babia hecho on algunos de sus predecesore ; otros in decirl

manifestaban desear su muerte de modo que no fuesen re pon ables.

Pero los libertinos atrevidos , los sinceros entusia tas , y lo rigido

republicanos querían un juicio público , que demo trase u fuerza pro–

clamara su derecho. olo Cromwell , mas fogoso que ninguno otro n

pro,rocar, se dirigía hipócritamente

á

su fin :

e(

i alguno, decia, hicie

e ta mocion con designio premeditado le miraría como al mas insigne

traidor del mundo ; pero ya que la Providencia y la necesidad han pue to

á

la cámara en

~ta

deliberacion , suplico

á

Dio bendjga su consejo ,

aunque no esté o di puesto

á

dar inmediatamente mi parecer.» Po.r uno.

de aquellos e traños pero invencibles escrúpulo que ponen de manifie to

Ja iniquidad cuando mas procura ocultarse,

á

fin de poner al rey en juicio,

in el pretesto de una ley eri nombre de Ja cual pudiera ser condenado,

e otó desde luego que babia cometido traicion ·n hacer la guerra al

parlamento ;

y

sobre la mocion de cott, se adoptó al momento una or–

denanza, in titú ndo un supremo tribunal encargado de juzgarle. Debía