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das
y
los errores financieroo de la épo·
ca,
fueron suficientes para superar
}¡¡,
influencia de los hábitoo de la
raza in·
dígena, de
la
riqueza del Perú,
y
pa ·
t<l
reducirlo
á
una vida económica
tan
miserable como
la
de Españíl..
fo.
insol vencía del erario tenía
que
Aer, como se reconoce
en el
Discurso
(3.0), muy rlafí.ioa para América. Cuan·
do
011.rlos
V
no podía vi<tjar por
fal·
ta de dinero
[3L]
y
dejaba
á
so
)Iluer·
te una deuda tal que no bastaban
para
cubrir sus intereses la!'! rentas ordi
na·
rias
y
extraordinarias
[32]:
caandu
Fe·
lipe
II
no aprovechaba la victoria de
San
Quintín por carencia de dinero, ·
comunicaba
á
la 11oberoadora de los
Países Bajos que no podía enviarle ni
un
real [33], se entrisnecía al ver
que
no
sabía
un día de lo qué
había
de vi·
vir al otro (34);
y
en 1575 rogaba at
Papa mandase
á
los
prestami~tds
geno·
veses que no le cobraran por sus dt\U·
das más jnterés que el 7 por 100 [35]:
RO
Pág 30.
31 Laurent, Estudios sobre la Historia
de la humanida<l, tQmo X.
pl1g;s.
205-6.
32 Danvila
y Collado, obra cit. tomo2?,
pág.
273.
-:..
:l~
Laurent, obr1:1. cit., tomo X,
páJS.
206
y
140.
,.
3t
Lafuente, obra cit. tomo
X[,
pág.14.
35 Picatoste, obra citada tomo III, pág.
104·