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,po1· D ios á la Iglesi a la potes-
,los
fieles."
E sta proposlCIOn
,;ta,l para qne se comunicase á tiene dos partes: la una que to–
, los Pastores, que son ministros do
el
régimen y gobi erno de la
,suyos para la salud rle las al- Igl esia naciente se hacia por
,,mas ··-Censura.-
Entendida
Concilios, esto es falso
y
absnr–
de tal suerte que
del comun de
do, pues que para eso habria
los fi eles se
de1·ive
á
los Pastores
sido p1eciso un cnerpo si em–
la
potestad del ministerúJ
y
1·é-
pre permanente de Obispos
gimen eclesiástico-
1-IERE-
congregados,
a
manera del Se-
TICA.
11ado de Venecia, en cuyo caso
Por no interrumpir el hilo el régimen de la Iglesia seria
de la demostracion, no he acn- ari8tocratico-lo cua! es heréti–
mulado los parajes varalelos dd co. La otra parte de la propo–
Libro sobre esta heregia.
A
siciou,
á
saber, que el gobicr–
cualquiera que lea con aten- no de la
Igl~ sia
se hacia por
cion, le saltan
á
los ojos. Así congregaciones de los
f1.eles,
en la pag. 82, lin. 33, dice: "La esta es su democracia-la cual
,,autoridad suprema está en la es herética-ya por oponerse
á
, Igl esia.
a
la que
t~e pre senta
el la palabra espresa ele S. Pablo
,,Concilio ...• " Que la Igle- en el capítulo 20 de los Hechos
si a tomada por la muchednm- A
po ~tólicos,
en donde dice:
bre de los fi eles, que es el sen- "Que el Espíritu Santo puso á
ti do ya espuesto del autor, ten- ,los · Obispos [ uno en cada
gala autoridad suprema, es la ,,Diócesis] para regir y gobcr–
heregia antes condenada: que ,nar la Iglesia de Dios"-
Aten·
el Concilio represente
a
esa
dite vobis, el universo
gregi,
i n
muchedumbre de fieles, como
quo vos Spiritus Sanctus
p~'~s
en nuestras He-públicas demo-
suit Episcopos·
1·eg ere
Eccle·
cráticas los.Congresos al pue-
siwn Dei.
Ya porque si el Sr.
blo , es igualmente falso
y
heré- Pío VI condenó la proposicion
tico; pues que los Concilios re-
1O
de las actas del Sínodo de
p resentan no al pueblo sino al Pystoya q11e asociaba
á
los
Colegio Apostólico, en donde Parrocos y Sacerdotes, como
ori ginariamente
fue
puesta la conjueces al Obispo; cua,1to
au toridad divina de nuestro mas condenable es la proposi–
s:
J.
C.
cion, de que el régimen de la
En la pag. 63, lin.
31
dice: Iglt•sia se hacia por congreg:;t–
('Me parecPque estudiando con ciones de simples fif'les. Seria
.,.atencion la historia eclesiasti- un nunca acabar, detenernos
,,ca desde los
primeros.dias del sobre cada artículo, cuando es
~,n a cimiento
de la Iglesia, ha- tan co·piosa la mies de los erro .:
,,liaremos
que todo
el
1·égimen
y
res. Solo añadiré una obser·
,,gobierno
dP
ella, se.hada
por
vacion,
y
el' que N. S.
J :
C. al
~; Gonc..itios
y
congregaci{)rte./3
de,
d epositar la-suma. del.}Joder
e~