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mientas de
e
te Santo,
f'S
por-
su di scurso 32, ac erca de
1a
qne en el sigl o 19, con la 11Ler-
.Iglesia, rlice así: "l,os minis–
t ad de la imprenta, cada uno es
,tros de los heregc·s hacen
to–
dueüo de decir con el impío:
,dos los esfu erzos posib] Ps pa·
Labia
--n ost1 a
á
n.obis sunt ¿rruis
,,ra corromper la fuente Evan –
n oster
Dommus
est?
Esós ¡Pen·
, gélica,
á
fin de que no halle
samientos son tan de S. lrran-
,,en ella Pedro sus llaYes,
y
pa–
cisco de Sales, como el Augus-
, ra retraernos de la obediell cia
tinus de
J
an senio contiene la
,debida al Vicario de
J.
C.
¿Y
de>ctrina de S. Agustín..
¿Co·
,para esto qué hicieron?
lJi–
tno pudo caberle en la cabeza
á
,,j eron que la promesa del Se–
este Señor, que semejantes pa-
,,ñor se babia h,echo
lÍ
S. P edro
labras habían salido de los la-
,,en
nomb1·e
de toda la Ig lesia;
bios de-un Santo que c0mpnso
,de modo que no queaaba en
esa bella Letanía de los tí-tulos
,,su persona ningun priviLegio
honoríficos con que los SS. Pa-
,,pm·ticular.
Si con esta inter–
dres
y
los Concilios han ensal-
,pretac.ion no se pervierte la
z ad~
la supremacía }lontificia?
, Sagracla Escritura, no sé qué
¿Como pudo cnbPrle en la cabe-
,otro medio
Sf'
pueda buscar pa·
za.que este Santo pronuncian-
,,ra corromperla.
¿Pues no es
~lo
tan toscas espresiones, se
, Pedro
á
quien el Seiíor habló?
deciarara un impostor
y
un hi-
1
,¿Y
como podía esplicar su in–
pócrita, puesto 1ue con las ar-
,tencion con m'ayor claridad,
mas que le suministraba Belar-
,,que con las palabras;
Et
ego
mino
y
la nncion cel estial, re·
,dico tibi
q.........
Dabo
tibi
<}?
dujo é hizo doblar la ceniz or-
,Habiendo hablado inmediata–
§"Ullosa
á
los pies del Trono
,mente antes de
la Iglesia,
Pontificio,
a
mas de seten a mil
,cuando dijo que las puP.rtas
protestantes? ¿Como pudo ca-
~,del
Infierno' no pred 1l ecerian
berle en la cabeza
a
este escri-
,contra ella: si hubiese sido su
tor desnudo de crítica, que tan
,,voluntad darla las lla\'es, in-
. grande Santo estampara seme·
,mediatamente hubiera añadí–
jantes Pensamientos, cuando en
,~do:
ct daba illi;
pero no dijo
el pasaje citado se le hace de-
,illi,
sino
tibi.
Así qu e, si es
cir,
que la discrecion le impedía
,lícito esplicar de este modo el
el mentm· lo que pensaba?
En
,,sagrado texto, ya no habrá.
•
donde ha encontrado
qup se es-
,ninguno que no pueda violen- ·
'p rese lo que no se 1nienta?
¡Qué
, tarse
a
cualquier sip:nificado."
tal estudiantazo es nuestro Sr.
Si es sincero el aprecio de nues–
Vi daurre!
tro autor
á
S. Francisco de Sa-
Oiga ahora, ya que las cloc·
les, sus consuelos se le com·er–
trinas de este grande Santo son
tirán eu grandes agitaciones, al
de tanto consuelo para su al-
verse adocenado por él, con la
ma, lo que ha dejado escrito en
turba de los here-ges que
cor""