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INQUISICIÓN DE CHILE
del Ordinario, é de su notario'; é diga que por
la libertad que ha tenido é tomado como goberna–
dor é justicia mayor de aquella provincia, é con
arrogancia é temeridad dijo é afirmó las dichas
proposiciones inorantemente, las cuales han cab–
sado escándalo con su mal ejemplo, sean edifi–
cados con su humildad, obidiencia é reverencia
que tiene á la Santa Madre Iglesia: se le man–
dó hacer é hace aquella penitencia, de lo cual
invíe ante el Ordinario deste Obispado testimo–
nio del Vicario ques
ó
fuese en la dicha cibclad
ele Santiago, con la primera gente que salga para
este reino, con el apercebimiento que no lo ha–
ciendo ni invianclo el dicho testimonio, se pro–
cederá contra él como contra persona impeniten–
te . Más le condenamos en un mil é quinientos
pesos ele plata ensayada, aplicado en esta manera:
los seteóentos é cincuenta pesos para ayudar á
pagar un terno ele brocado questa Santa Iglesia ha
comprado, é los otros setecientos é cincuenta pe–
sos para gastos ele justicia,
á
la clispusición del
Ordinario. Más le condenamos á que dé á la Igle–
sia parroquial ele Santiago del Estero una campa–
na que pese más ele dos arrobas. Más le condena–
mos en las costas dcste proceso, la tasación de las
cuales se reservan al Ordinario; lo cual todo guar–
de é compla é pague antes que sea suelto de la
cárcel é prisión en que está; é compliéndolo é pa–
gándolo, le mandamos absolver de cualquier cen–
sura y excomuniones en que ha incurrido cerca
de lo contenido en este p'roceso; é le mandamos
alzar cualesquier secrestos de bienes que sobre esta
cabsa se le hayan hecho.
É
por esta nuestra sen-