436
DOCUMENTOS
table de la artillería, y aún me certifican que era señor del navío
y
mercaderías , y la traía en cabeza de españoles, y aunque venía ga–
nando salario de los estados de Holanda y Gelanda y de explorac
la tierra y todas sus fuerzas, y era un famoso hereje calvinista que–
robó el navío de registro que venía para esta isla el Agosto
pasado~
con las haciendas de los mercaderes y vecinos della,
Ya comienzan los herejes esta isla con rescates á infestarla y mo–
lestarla,- que hasta ahora había estado intacta; ll egó un inglés con
un navío suyo á un puerto della, para cuyo efecto echó un solda-–
do en tierra, español, que debía ser su intérprete, Dios, nuestro se-–
ñor, por su infinita misericordia mire esta tierra con la infinita.
acostumbrada su ya, qúe lo ha bien menester, y á V. A. guarde–
con muchos favores suyos.-En Puerto Rico, y de Noviembre 26 de-
I6o6.-Fray 'Jvfartin,
obispo de Puerto Rico.
'
XIII
Carta d el Obis¡;p de Cuba quejándose de la persona del
comisario del Santo Oficio de Cartagena.
Muy poderoso señor:-Dos años há que avisé á V. A. la nec€si–
dad que tenía esta isla de ser v.isitada por las muchas ofensas qu e:
á Dios se hacen con pactos con el demonio; y por si caso nuestras
cartas no han llegado á manos de V.
A~,
torno á referir en ésta las
mismas razones, porque esta peste no vaya creciendo cada día más,.
tan en daño destas ovejas, de lo cual será necesario que con breve–
dad d e V. A. mande poner remedio en ello, y también en lo que toca
á los comisarios qu e de Cartagena se envían aquí, porque el que
hoy sirve es un fray Francisco de Bonilla, del Orden de San Fran–
cisco, á quien por sus malas costumbres estos años pasados em–
barcaron sus perlados para esos reinos,
y
se volvió sin licencia
y
en hábito de marinero, y todo lo demás del tiempo de diez años
que há que estoy en este obispado le han tenido por comisari'o en–
la ciudad de Cuba,
á
donde ha hecho muchas ignorancias, contra.
lo que ordena la clementina, usurpando el oficio de los curas y vi–
viendo licenciosamente, perdiendo la obediencia
a
sus superiores.–
dando mal ejemplo y escándalo á toda esta isla: por lo cual echa-–
rá de ver V. A. si' es razón que religiosos semejantes tengan á sn.
cargo oficio de tanta consideración é •importancia, pues su Ord<m'
no le halla benemérito de darle una guardianía de dos religiosos.
Suplico á V. A. se remedie lo uno y lo otro, que aunque es hechu-